Anotemos ahora en la hoja cuatro

Norma Rodríguez Derivet
7/9/2017

Deslumbrada asistí, en el año 2013, a la inauguración de la primera edición de Pos-it. Expoventa de Arte Cubano Contemporáneo, convocada por el Fondo Cubano de Bienes Culturales (FCBC), con el objetivo de visualizar la producción artística de los creadores menores de 35 años. Dos galerías recién remozadas —Galiano y Collage Habana— acogieron la muestra de 56 artistas, seleccionados en un conjunto de 108 —algunos estudiantes; otros, egresados ya de las escuelas de arte—. Artistas y público colmaron los espacios convertidos en un hervidero de ideas cuestionadoras, lúdicas, reveladoras…

El Premio Nacional de Artes Plásticas, René Francisco Rodríguez; la artista Mabel Poblet, y la Dra. María de los Ángeles Pereira, profesora de la Universidad de La Habana, conformaron el primer jurado que laboró mancomunadamente con María Milián y Miriam Pérez Casanella, en ese momento Directora y especialista, respectivamente, del Centro Nacional de Artes Plásticas Collage Habana del Fondo Cubano de Bienes Culturales.


S/T XXXII (2013), óleo sobre lienzo, 135x 120 cm. Esta pintura de Niels Reyes (Villa Clara, 1977)
se inscribió en la primera hoja de Post-it como Gran Premio

 

Niels Reyes se alzó con el Gran Premio; Lisandra Ramírez y Ruth Mariet compartieron el primer escaño; lo mismo sucedió con la segunda posición, en la cual se hermanaron Javier Castro y Glenda Salazar. Después, se inauguraron las muestras individuales radicadas en el sistema de galerías del FCBC; se concretó la adquisición de las obras, y se editó un catálogo con las memorias del evento. Luego, aconteció el nacimiento excepcional de una relación creciente, sostenida y mutuamente enriquecedora entre el Fondo Cubano de Bienes Culturales y los artistas visuales cubanos de cualquier generación.

María Milián, en el catálogo correspondiente, conceptualizó este alumbramiento “como un proyecto que, desde la institución, sugiere promover e impulsar un criterio colectivo de lo más actual de la creación artística cubana, sin distinciones que incluyan tipologías discursivas. Articula ofertas mediadoras para esa zona en deuda que reconcilia intereses con las nuevas generaciones. Su carácter de concurso se sustenta en la buena fe de respaldar con apoyo material el avance de talentos aún por develar. La particularidad de esta propuesta sugiere canales novedosos de emisión y tránsito de una estética plural e híbrida, circundada por los efectos de la globalización; peregrina de los cuestionamientos del hombre y su cosmogonía; donde lo autorreferencial distingue la réplica de diálogos tan varios como su propia esencia…”.

El “azar concurrente” hizo que Pos-it 2 me abriera nuevamente las puertas,    esta vez desde la experiencia laboral en el mismísimo corazón del evento. La Galería Artis 718, la tercera de índole comercial promovida por el FCBC en La Habana, quedaba inaugurada el 5 de septiembre de 2014 con una muestra colectiva de esta segunda edición.

Post-it 2 generó nuevos desafíos; simultáneamente, suscitó mayor interés como proyecto sin precedentes dentro del arte cubano. Desde todas las provincias acudieron 120 jóvenes talentos, 48 de ellos resultaron seleccionados. En esta ocasión, el jurado estuvo presidido por los artistas Moisés Finalé, Niels Reyes y Alex Hernández, quienes deliberaron de conjunto con los especialistas del FCBC. Los lauros llegaron a manos de Jorge Dáger (Gran Premio), Ariamna Contino (Primer Premio), Adislén Reyes y Adrián Fernández (Segundo Premio compartido). Por su parte, el Grupo Triangle y Josuhe Pagliery fueron favorecidos con el otorgamiento de facilidades materiales para su creación como estímulo a sus competencias. El debate estético encontró su caldo de cultivo en cada muestra, estableciendo una relación dialógica entre el imaginario de cada artista y el público escudriñador que se acerca para conocer su alma.

Cuando en 2015 resonaban aún los ecos de la XII Bienal de La Habana, se lanzó la convocatoria a Post-it 3. Para mayor complejidad, un nuevo requisito aumentaba las exigencias: las obras debían ser inéditas. Sin embargo, lo que parecía ser un septiembre agotado artísticamente, sorprendió con la participación de 166 artistas optando por su oportunidad; de ellos, fueron escogidos 48.

El Premio Nacional de Artes Plásticas Eduardo Ponjuán, las artistas Lisandra Ramírez y Adislén Reyes, y la profesora de la Universidad de La Habana Hilda María Rodríguez decidieron otorgar un Primer Premio a Linet Sánchez, de Villa Clara; el segundo a Ricardo Miguel Hernández, de La Habana y el tercero a Renier Quer, de La Habana.

Aunque el nivel creativo y conceptual no estuvo a la altura del constatado en ediciones anteriores —y así quedó establecido en el Acta del Jurado—, fue incuestionable el reconocimiento al valor y la importancia que entraña un evento de esta índole. A partir de esta última experiencia y tomando en consideración las circunstancias que incidieron en los resultados, se determinó otorgarle un carácter bienal.

En este 2017, septiembre inicia ultimando los detalles de un nuevo Pos-it, el número 4. Tras una etapa de reconceptualización, 54 concursantes expondrán desde este 6 de septiembre su obra en tres galerías del FCBC (Galiano, Collage Habana y Artis 718). Aunque el reto de cautivar con las mieles de la primera edición a un público cada vez más riguroso ha aumentado considerablemente, el trabajo de selección y curaduría se ha tornado más interesante. Esta mezcla de empeño con desafío por visibilizar a los talentos emergentes en la isla caribeña justifica que una empresa como el Fondo de Bienes Culturales, que por 39 años se ha dedicado a la promoción y comercialización de las artes plásticas en el mercado nacional e internacional, apueste por un concurso de esta naturaleza y anote sobre el arte en la hoja cuatro.