Cuba y Francia: fresco musical de naciones

Aline Marie Rodríguez
1/4/2016
Fotos: Cortesía del Centro Pablo

El escenario del teatro del Museo Nacional de Bellas Artes resultó pequeño para la unión musical de los cubanos Cofradía + Nuevo y los franceses Jack and the Giant Bean el pasado 26 de marzo. La mezcla de sonoridades del pop, el folk, el jazz y el blues con géneros tan autóctonos como el son y la trova convirtió esta presentación en un fresco cultural y epocal de naciones tan distantes geográficamente como Francia y Cuba.


 

El encuentro comenzó con un solo de guitarra hawaiana de Kevin Dall’ Agnol, quien es la voz líder de grupo europeo, a quien lo acompañan Ethien Busson en la percusión y Marlon Nemoz en el bajo. Tres jóvenes artistas, cuyas composiciones abordan temas universales como el amor y el desamor, la amistad y los problemas de la vida cotidiana.

Con un repertorio en inglés y en francés, que transita desde temas esencialmente rockeros, hasta otros en los cuales la mezcla entre folk y blues es protagonista, los músicos multi-instrumentistas demostraron sus amplias habilidades en escena.


 

Jack and the Giant Bean dedicó un tema a las víctimas de los atentados terroristas ocurridos en Bélgica, así como a Lía Llorente, a quien Kevin Dall’ Agnol definiera como su “madre cubana”, quien no pudo acompañarlos en esta ocasión por encontrarse hospitalizada.

La música contagiosa de Cofradía + Nuevo no tardó en escucharse. Los asistentes pudieron disfrutar de las interpretaciones, entre otros temas, de conocidas composiciones del dúo —compuesto por Lía Llorente y Pachy Ruiz, que ahora cuenta con un nuevo formato—, como son “Digo yo”, “La felicidad”, “Más arriba” y “Tal como somos”.

Pachy Ruiz compartió la historia de esta combinación entre Cofradía + Nuevo y Jack and the Giant Bean: “Asistimos a una cosa muy linda que empezó a pasar el año pasado —explicó—, cuando Lía, con Lucimila Rodríguez, Eduardo Quintana, Rainer Pérez y yo fuimos a parar 800 kilómetros al sur de la ciudad de París para encontrarnos con estos músicos y allí nos pasamos 18 días compartiendo. Nos hicimos muy buenos amigos. Ellos aprendieron a tocar la música cubana como lo han demostrado aquí y nosotros hicimos algo con su folk, pop y blues. Creo que creció la cultura universal y también la nuestra”. 


 

Ambas agrupaciones compartieron varios temas, en los cuales se evidenció la fraternidad musical gestada primero en la nación europea, donde realizaron ocho conciertos, y luego por toda la Isla.

Antes de concluir el concierto, Pachy Ruiz agradeció la posibilidad de organizar estos intercambios musicales: “Quiero agradecer al Centro Pablo, al Centro Memorial Marthin Luther King, a la Unión Europea, al Museo de Bellas Artes, a Víctor Casaus, fundador y director del Centro Pablo, y a Carlos Acciari, coordinador de esta experiencia por Radio Francia Internacional” e instó a que se sigan organizando proyectos de este tipo, pues “la música y los músicos cubanos lo necesitan”.

Este encuentro en el Museo Nacional de Bellas Artes marcó el punto final de la gira que las agrupaciones realizaron por varios escenarios cubanos, desde el pasado día 17 de marzo y que los llevó por Trinidad, Santiago de Cuba y Holguín.

Esta combinación musical entre Francia y Cuba forma parte del proyecto ACCEDES, un convenio cultural entre el Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau, el Centro Memorial Marthin Luther King y Radio Francia Internacional, que cuenta con el financiamiento de la Unión Europea.