Hasta la victoria siempre, querido Rafael

Red en Defensa de la Humanidad
4/3/2020
Foto: Capítulo cubano de la Red en Defensa de la Humanidad
 

La noticia de la partida de Rafael Cancel Miranda nos sorprendió, no porque no la esperábamos, sino porque se hace difícil imaginar un mundo sin este boricua extraordinario que desde temprana edad no dejó de luchar un solo instante por la independencia de su amada Puerto Rico.

El día antes de su partida, el 1 de marzo, se cumplía otro aniversario del ataque al Congreso de EE. UU. para llamar la atención sobre la situación de su patria, junto a sus compañeros de lucha Lolita Lebrón, Irving Flores Rodríguez y Andrés Figueroa Cordero. Por esta acción heroica Rafael Cancel Miranda fue sentenciado a 84 años de prisión, de los cuales cumplió poco más de 25 en prisiones federales en los Estados Unidos.

Rafael era profundamente fidelista. Sus convicciones fueron y son tan profundas que, a pesar de su amor por Cuba, se despidió de ella, de Fidel y de muchos amigos entrañables por negarse a viajar con un pasaporte colonizado de EE. UU.

Don Rafael, como lo llamaban cariñosamente sus amigos y compañeros, nunca perdió oportunidad en cualquier lugar donde lo invitaban para hablar y pedir apoyo por la libertad de otros presos políticos, no solo boricuas sino de cualquier país del mundo. Llevaba el caso de Oscar López Rivera a todas partes y tuvieron la dicha de encontrarse y compartir en  libertad. No dudó un instante en acompañar la lucha por la libertad de los Cinco Patriotas Cubanos presos en EE. UU. y, a pesar de que su salud ya no lo acompañaba, viajo a Washington DC en varias oportunidades para sumarse a las acciones por tan noble causa.

De Rafael aprendimos que se llega más rápido a la meta de pie que de rodillas, que la verdad vale la pena repetirla hasta el cansancio, que el odio y la maldad destruyen, pero el amor y la buena voluntad construyen, y que los imperios solo respetan a aquellos pueblos que pueden y saben defenderse, a los que jamás claudican.

No le decimos adiós sino un hasta siempre infinito, lleno de amor, respeto y admiración.

Hasta la victoria siempre, hermano querido.

Red en Defensa de la Humanidad

Nuestra América, 4 de marzo de 2020