De Valencia a La Habana: ruta del cine educativo

Rubén Ricardo Infante
31/1/2020

La primera edición de la Muestra Internacional de Cine Educativo (MICE) Habana‒Foco Valencia, ha permitido el encuentro entre el evento y la isla. Desde hace varios meses se realizan acciones que tributan a lo sucedido en estos días y confirman el potencial creativo en las manifestaciones artísticas. Aunque MICE Habana‒Foco Valencia llega por primera vez a Cuba, aspira a insertarse como un referente dentro de los eventos que apuestan por la niñez, la adolescencia y el impulso a las actividades de realización audiovisual.

Cartel de MICE Habana. Foto: Cubarte
 

Uno de los atributos del evento es que propone la necesaria interacción entre las artes. Así, se pensó en dejar una huella más allá de las proyecciones, talleres y debates de filmes. El 29 de enero se inauguró el mural MICE. Un puente de cine educativo ValenciaLa Habana, en La Timba, y está ubicado frente a la entrada del importante centro cultural La Plaza de 31 y 2.

Este tipo de acciones son fundamentales, pues muestran en los espacios el interés del evento en dos sentidos: afianzarse en el desarrollo de otros proyectos en común y hacer del MICE Habana un encuentro anual.

Después de su inauguración, celebrada este miércoles en el cine La Rampa, durante los 30 y 31 de enero, en el horario de 2:00 a 4:00 p.m., se realizaron los pases oficiales en las salas Riviera y Multicine Infanta. Algunos de los materiales vistos en estas jornadas son: Bikes (Manuel J. García, 2019), Arrugas (José María Balaguer, 2011), Buñuel en el laberinto de las tortugas (Salvador Simo Busom, 2019), The other kids (Pablo de La Chicca, 2015) y Campeones (Javier Fesser, 2018).

De igual forma, se concibió una programación para espacios alternativos como el Parque Tecnológico Finca de los Monos y Ciudad Libertad.

Otro de los propósitos del evento fue la realización de talleres para compartir experiencias con los interesados. Los dos ya hechos propiciaron el impulso hacia la producción de animación, por eso el vínculo de la animadora cubana Ivette Ávila con la Galería-Taller Gorría y,  en el Proyecto Muraleando de Lawton, la asistencia de la directora de cine y futura directora de MICE, Claudia Ruiz.

Otro de los espacios en los que se enfocó fueron las escuelas pedagógicas, teniendo en consideración que, si nuestros maestros dominan herramientas de apreciación y criterio, pueden contribuir a que sus alumnos sean formados con una cultura audiovisual que los sitúe en mejores condiciones para evaluar la calidad de los productos culturales a los que se enfrentan.

A través de la exposición‒debate, estos talleres se concentraron en los ejemplos concretos que aportan las obras escogidas: Picotazos contra el cristal y Nada será igual, en la Escuela Pedagógica de Boyeros y el Cerro.

Otras actividades ocurrieron en la propia sede del Instituto Cubano de Investigación Cultural Juan Marinello, los Estudios de Animación del ICAIC, la Escuela Internacional de Cine y Televisión (EICTV), la Iglesia de San Francisco de Asís y la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana.

La participación de invitados de España, México, Argentina, Bolivia, Canadá, Alemania y Brasil, que formaron parte de acciones concretas, posibilita el intercambio de experiencias diferentes y la socialización de cada una de ellas, desde el debate y la interacción.

Sumar las voluntades de personalidades cubanas que pueden, desde sus diferentes ámbitos profesionales, seguir profundizando en los objetivos del evento, ha sido una ganancia. Por esa razón, se vincularon la realizadora Marilyn Solaya, el crítico Frank Padrón y el actor Jorge Perugorría.

El evento se propone continuar todos los años con la temática general de Cine y Educación, y dedicar su muestra audiovisual a un país determinado. Además, pretende abarcar otras aristas de este fenómeno de forma interdisciplinar con el propósito de situar a La Habana como un referente de la “educomunicación” en el escenario mundial.

Por ahora, cuando concluye la primera edición de MICE Habana, nos queda esperar la concreción de otros acuerdos, la sostenibilidad de sus postulados y la idea de que la educación audiovisual es un tema donde intervienen distintos actores sociales. Así pues,  es cada vez más urgente intervenir con proyectos de este tipo en aras de que nuestros niños y niñas incorporen saberes y prácticas.