Cuando temprano en la mañana llegué al salón de espera del Palacio de las Convenciones para dar inicio al Consejo Nacional de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), disfruté de una sensación única en ese momento. Donde quiera que posaba la mirada, veía a una relevante personalidad de la cultura. Ya fuera un artista de la plástica, actor, músico o un crítico, todos desprendían el destello de alto rango del intelectual con quien el pueblo se reconoce.

Semejante sentimiento de bienestar compartido me confirmó la certeza de que en aquel salón se aunaba una buena carga de vibraciones positivas con hondo calado espiritual, las suficientes que me llevaron no a imaginarme, sino a ver como si Sindo Garay acabara de llegar, Wilfredo Lam estuviera por allá conversando con un grupo de pintores y el Benny Moré, muy cerca de mí, preparándose para ser entrevistado para el Canal Habana. Un delegado al ver lo emocionado que yo estaba mientras narraba la insólita anécdota, me preguntó muy serio, si en realidad yo había visto a tales personalidades. Mi respuesta fue todavía mas sorprendente. “Es que ante tanta calidad humana y talento artístico concentrados en este salón, no era de sorprender la llegada de próceres como Carlos Manuel de Céspedes y Máximo Gómez, quienes avanzaban orgullosos entre los afectuosos vítores de tantos cubanos buenos aquí reunidos. La ovación resulta inevitable cuando se nos aparecen Martí acompañado de Fidel quien, con la mayor sensación de plenitud reflejada en el rostro, le presenta al Apóstol cada personalidad que se les acerca”.

Comisión de Cine, Radio y Televisión encabezada por la viceprimera ministra Inés María Chapman, el ministro de Cultura Alpidio Alonso y las miembros del Consejo Nacional de la Uneac Magda Resik y Lourdes de los Santos. Foto: Liesther Amador

Sin lugar a dudas, estas reuniones del Consejo Nacional de la Uneac y de sus invitados —con la presencia de dirigentes con altos cargos en el gobierno, encabezados por el Presidente de la República Miguel Díaz-Canel Bermúdez—, constituyen la tribuna propicia para el productivo diálogo entre la vanguardia artística, cultural y política de la Revolución, para ratificar nuestro compromiso con el pueblo en la protección de los valores espirituales que encierra el arte, premisa imprescindible para el desarrollo de la nación cubana.

Con la presencia de la viceprimera ministra Inés María Chapman y del ministro de Cultura Alpidio Alonso, además de las miembros del Consejo Nacional de la Uneac Magda Resik y Lourdes de los Santos, el ambiente que se respiraba en la Comisión de Cine, Radio y Televisión era de confraternidad y de confianza en nuestros propios esfuerzos para salir adelante por encima de las mayores dificultades.

“El Consejo Nacional de la Uneac constituye la tribuna para el productivo diálogo entre la vanguardia artística, cultural y política de la Revolución”.

En tal sentido, la compañera Chapman ponderó la necesidad de crecer a partir de recursos endógenos para lograr emanciparnos, mientras que el ministro de Cultura resaltó nuestra capacidad de resistencia creativa demostrada durante los dos años de pandemia. Entre las soluciones más apremiantes para hacerle llegar el arte al pueblo puso como ejemplo los conciertos de nuestros músicos en más de 500 emisiones online del espacio Estamos Contigo, que se transmite por el Canal Clave. También destacó la importancia del posicionamiento de los símbolos patrios reflejados por los creadores en el video clip del tema El Mambí, interpretado por Santiago Feliú y de la autoría de Luis Casas Romero.

Al decir de los participantes, el tema de la radio fue la problemática más comentada en este encuentro por el tremendo valor que tiene como arma imprescindible para defender la Revolución desde los medios. A propósito del Centenario de la Radio Cubana fundada por Luis Casas Romero el 22 de agosto de 1922, se escucharon diversas voces reclamando el orgullo de tan importante fecha para la radio de nuestros días.

Otro tema del que se habló ampliamente durante la comisión de trabajo fue la adecuación de los planes de estudio de la Facultad de Medios Audiovisuales, así como de la necesidad de que los graduados de dicho centro de altos estudios se sientan atraídos para conformar el urgente relevo que necesita la radio nacional en sus diversas especialidades. Por su parte, Luciano Castillo, director de la Cinemateca de Cuba, alertó acerca de la necesidad de que las actuales realizaciones audiovisuales dispongan de una copia para ser archivada en la Cinemateca como parte del patrimonio cinematográfico del país.