Fantasía de Los Cuenteros

Ana Esther Zulueta
2/8/2018

Palmiro se anima otra vez en Isla de la Juventud cuando la tierra, la luz, el agua y las flores constatan que es sitio ideal para que este ser de 2,15 metros de altura cobre vida por el calor de los humanos y la naturaleza.

Con esta propuesta regresó a la segunda ínsula cubana, después de 13 años de ausencia, la compañía Los Cuenteros desde San Antonio de los Baños, Artemisa, invitada por el Consejo Municipal de las Artes Escénicas, a tenor de las actividades concebidas para este período estival.


Fantasía de Los Cuenteros de San Antonio de los Baños en Isla de la Juventud, una propuesta titiritera en el verano 2018.
Foto: Roberto Díaz Martorel
 

En la puesta en escena del musical, con ausencia total de diálogos, del 28 al 29 de julio, los lugareños percibieron la importancia de la protección y cuidado del medio ambiente, esencia de la obra, en la que el centro de atención es la marioneta gigante, y gracias a la pericia de cinco actores es capaz de bailar, hacer acrobacia, e incluso trepar árboles.

“Nos hemos presentado con Fantasía en casi todas las provincias, con gran aceptación del público”, afirma Malawi Capote González, directora general y autora de la pieza teatral. Refiere la también actriz, que en casi cinco décadas de existencia, esta compañía se ha caracterizado por trabajar el títere de retablo, aunque a veces haya que ir con los tiempos para no quedar atrás.

¿Cómo nació Palmiro?

“El actor José Luis Rivero y yo tuvimos la oportunidad de participar en el taller de animación impartido por miembros del Stabfiguren Company de Alemania, durante la XI Edición Internacional del Titim, teatro de títeres celebrado en Matanzas en 2016”, recuerda Capote González.

“A partir de ese momento nació la idea de escribir “Fantasía”, concebida para espacios abiertos como plazas y parques, obra que se inicia con un pasacalle para convocar al público”, dice.

“Construimos el muñeco nosotros mismos sin conocer la técnica. Para ello utilizamos materiales reciclables y naturales como cámaras de bicicletas y caña de bambú, en tanto los alemanes nos aportaron los elásticos para los mecanismos a fin de perfeccionar un poco la marioneta”, explica.

“Palmiro es la versión criolla de la germana, cuya dimensión alcanza 1.93 centímetros”, apunta Capote González, quien precisa que tuvo la posibilidad de manipular al original, “es una pluma y esta versión criolla es un plomo”, se divierte.

Precisa la directora que se trata de una técnica complicada resultante del títere de varilla y el bunraku —nombre genérico por el que es conocido el teatro de marionetas japonés—, en la cual el títere es animado por cinco actores a partir de un trabajo de coordinación y una coreografía de mucho rigor, para lograr el movimiento corporal del muñeco.

“Para nosotros puede haber técnicas más o menos complicadas, pero no imposibles, son retos que nos imponemos para hacer un trabajo de calidad, porque somos exigentes en cuanto a la animación. Amamos lo que hacemos y estamos comprometidos con el títere en Cuba”, subraya.

“Este tipo de trabajo es novedoso para nosotros”, asegura Rivero, al tiempo que califica a Fantasía como un espectáculo “Vanguardista”, aunque recalca que el grupo jamás renunciará al teatro de retablo, esencia de Los Cuenteros desde que el actor y pedagogo Julio Capote Cao, uno de los mimos más importantes de la historia de Cuba, lofundara el 19 de noviembre de 1969.

En esta presentación también está la impronta del maestro Félix Dardo, quien dirigió por más de 40 años el colectivo, ahora bajo la batuta de Malawi —con experiencia vasta como actriz—,  enfrentamos nuevos desafíos a partir de sus inquietudes, porque es más contemporánea.

Recuerda Capote González —hija del reconocido Mimo y de la actriz fundadora Graciela González Capote, quien con 73 años de edad se mantiene activa— que a los actores les llevó tres meses dominar la técnica, pero con perseverancia y muchos deseos de hacer lo lograron, y el resultado se aprecia en cada puesta en escena.

“La música es del cuarteto Bond de cuerdas británico-australiano, una de las cosas que más llama la atención de la puesta en escena”, agrega.

¿Qué los distingue?

“Esta compañía se caracteriza por funcionar como familia y esa energía la transmitimos en cada una de nuestras presentaciones, presumo, además, que tengo a los mejores titiriteros de la Antilla Mayor. Así lo creo”, dice convencida.

Cado Rodríguez Pantoja, actor y director del grupo La Gruta en Isla de la Juventud, destaca que Los Cuenteros nunca han perdido su sello, provienen de una tradición fuerte de raíz e identidad teatral cubana,que empieza desde la dramaturgia hasta el último movimiento escénico del actor más joven del grupo.

Precisa el experimentado actor, egresado de la Universidad de las Artes en Cuba, que en la tradición escénica en la historia del teatro latinoamericano y cubano, los grupos de guiñol que más trascienden son precisamente aquellos que devienen de un seno familiar y este es el caso.

“Cuando mi papá por inquietudes artísticas viaja a La Habana para realizarse como Mimo, Félix Dardo asume la Compañía y le imprime su sello; al fallecer por problemas de salud fue un golpe grande, muchos se preguntaban qué ocurriría con nosotros y fue el arraigo el que dejó con vida a Los Cuenteros”, asegura Malawi.

Considera que el teatro de títeres en Cuba no está aún en el lugarque merece, se menosprecia a pesar del desarrollo alcanzado a escala mundial, tampoco los egresados de las escuelas de arte de nivel medio y superior se interesan por este tipo de expresión.

Los Cuenteros casi a la altura de medio siglo

“Ahora estamos trabajando en el espectáculo por los 50 años de la compañía, que incluye Cyrano y la madre de agua, obra de Ulises Rodríguez Febles, director de la Casa de la memoria escénica de Matanzas, en la que se funde la tradición europea con la cosmovisión de lo rural cubano”, comenta entusiasmada Malawi.

“Cuando iniciamos la investigación, según Samuel Feijóo —estudioso de la mitología cubana— dije: ¡caballero está escrita para nosotros! Miren qué casualidad en la obra, la madre de agua no es una serpiente,se convierte en mujer y la leyenda dice que en San Antonio de los Baños es donde único se ha visto el ojo de agua en forma de mujer.

“En fin, este es un espectáculo muy guajiro al estilo de Romelio y Juliana, de muchos dicharachos y controversias.  Queremos estrenarla el 28 de enero, el día que Los Cuenteros fundadores hicieron su primera función con Comino y Pimienta vencen al diablo”, comenta animada.


Fantasía de Los Cuenteros de San Antonio de los Baños en Isla de la Juventud, una propuesta titiritera en el verano 2018 
 

A la altura de medio siglo, Los Cuenteros —única compañía de títeres de gran formato en Cuba— sigue apostando por el guiñol de retablo,  aunque algunas veces haga guiños a la contemporaneidad para ir con los tiempos en pos de fantasías.