Haydée Milanés, el sueño posible de Villa Clara

Mairyn Arteaga Díaz
1/8/2018

Cada vez que llega a Villa Clara, Haydée Milanés encanta por su naturalidad y sencillez, por la comunión que logra con el público y sobre todo, por su talento. En varias ocasiones se le ha aplaudido en esta zona de la Isla, a la vez que el público corea, disfruta y se emociona con su arte.


Haydée Milanés durante su presentación en Villa Clara. Foto: Arelys María Echevarría Rodríguez
 

Este julio de 2018 no fue la excepción, con la diferencia de que esta vez la intérprete y compositora pudo sentir dicha experiencia en escenarios nunca antes pisados pero en los que anhelaba estar desde hace mucho tiempo. Así lo expresó la noche del 22 en El Mejunje de Silverio, un sitio emblemático para la cultura cubana y en el que se le recibió con el ánimo de los grandes acontecimientos.

“Este concierto es la muestra de que los sueños son posibles”, dijo el propio Silverio, y fueron casi dos horas mágicas en las que la abarrotada sala Margarita Casallas la siguió ensimismada. Haydée Milanés venía de cantarle a Encrucijada, en la casa natal de Abel Santamaría y donde viviera muchos años su hermana Haydée, la razón por la que la joven artista lleva este nombre.

“La experiencia –diría luego la artista– fue entrañable, cargada de esas emociones que llegan con la primera vez”.

De Santa Clara, junto a los músicos que la acompañaron en el periplo, partió a Placetas (23), Manicaragua (24), Cifuentes (25), Sagua la Grande (27) y concluyó en Remedios el domingo 29 de julio. En las memorias de Raúl Verdecia, a cargo de la guitarra y la dirección musical; Dayron Ortiz, en la guitarra; el Maestro Enrique Platt en la batería; y de Samuel Burgos, en el bajo, también quedarán estos instantes de gloria que les deparó la central geografía.

Su paso dejó una estela de buenos sabores y alabanzas, reportes de prensa así lo avalaron y quedó la invitación para noches venideras de este año o del otro o cada vez que haya chance para deleitarse con tal proposición.

“Yo estoy muy agradecida por esta gira que ha organizado Villa Clara, es realmente uno de los lugares donde más disfruto estar, por el público muy especial que tiene y que hace que me sienta siempre muy bien aquí”.

La noche del 22 de julio, ya lo hemos dicho, fue memorable para Haydée y para los santaclareños que acudieron a su encuentro. Un recorrido por parte de su trabajo musical amenizó una velada única, con temas muy conocidos por la gente y otros que se han incorporado recientemente a sus conciertos. Temas como “Yolanda”, “El breve espacio en que no estás”, “Amor”, “Ámame como soy”, todas de Pablo Milanés; así como “Una palabra”, de Carlos Varela; “Yo vengo a ofrecer mi corazón”, de Fito Páez; “Sin ir más lejos”, de Marta Valdés; “Tú y Yo”, “Libélula”, ambas de Descemer Bueno; y la música de su propia autoría marcaron pautas en un escenario privilegiado de tal manera.


Como “un concierto de ensueño” calificó Ramón Silverio, director de El Mejunje,
el paso de Haydée por este escenario
 

En algún punto de intimidad y sentimiento sonaron los versos de una santaclareña:

Nada son mis brazos para estrecharte / nada son mis labios para besarte / no puedo vencer este destino / que me separa de ti, más y más.

“Me encantó poder cantar una canción de Ela O´Farril –agrega Haydée– que es una de las grandes autoras cubanas y que penosamente no es tan conocida; siempre me gusta poder hacer un homenaje a algún autor que tenga que ver con el lugar donde estoy”.

Antes de salir de El Mejunje, Haydée Milanés agradeció por la energía del lugar, por lo especial de un escenario donde siempre había querido estar y que desde lejos admiraba. En el resto de los parajes sus expectativas se cumplieron, experiencias nuevas perfumadas sobre todo con ilusión y de donde se marchó con la satisfacción de quimeras que sí se realizan. Que se repita. No queda más.