La cultura cubana es la patria

Rafael Lam
11/10/2018

La nueva cultura cubana se gesta desde que el almirante Cristóbal Colón desembarca en nuestras costas, en 1492. Junto a él llegaron andaluces, portugueses, gallegos, vascos, catalanes, y le siguieron genoveses, florentinos, judíos, levantinos, berberiscos, etc.


“Cuba se convierte en un ajiaco, y tal analogía se aplica —con sus respectivos matices— a las demás naciones de América”.
Foto: Internet
 

Fernando Ortiz escribió que todo español, por el solo hecho de arribar a Cuba, era ya distinto de lo que había sido: no era español de España, sino español indiado. Con ellos llegaron la guitarra y los cantos hispanos. Más adelante vendrían los africanos, multitud de esclavos negros de muy diversas etnias. La inmigración, a través de cuatro continentes, propició una mixtura milenaria de pueblos, culturas y pigmentos. Judíos, franceses, anglosajones; gente del Oriente y de la zona del Caribe; chinos, hindúes; un verdadero crisol de elementos humanos. Cuba se convierte en un ajiaco, y tal analogía se aplica —con sus respectivos matices— a las demás naciones de América.

Por las desavenencias con la metrópoli, poco a poco los criollos devinieron cubanos. El sentimiento de nacionalidad hizo que los grupos de descendientes ofrendaran sus vidas por conseguir la libertad. Desde entonces, la cultura cubana siguió un derrotero ascendente en las más variadas manifestaciones culturales, incorporando ingredientes diversos.

Ligada desde sus orígenes a los procesos sociales del país, la cultura cubana consolida su aparición junto al primer estallido independentista en la Isla. Por tanto, la marca definitiva de su nacimiento es el 20 de octubre de 1868, día en que fue cantado por primera vez el Himno Nacional.


Foto: Unión de Escritores y Artistas de Cuba
 

Después de 1868, con el inicio de la Guerra de los Diez Años o Guerra Grande, la patria se hizo visible para todos. Cada cual escogió la manera de servirla, y  nadie pudo ya desconocerla, como dijera Cintio Vitier.

La figura de José Martí resume lo mejor del pensamiento y la cultura de sus antecesores, y crea una doctrina que continúa siendo en nuestros días una verdadera guía de conducta intelectual y revolucionaria.

En la historia de la cultura cubana resaltan nombres de gran valía: Perucho Figueredo, Félix Varela, José Antonio Saco, José María Heredia, Ignacio Cervantes, José de la Luz y Caballero, Domingo del Monte, Fernando Ortiz, Nicolás Guillén, José Lezama Lima, Alejo Carpentier, y muchos otros.

Algunos de estos hombres, como José Antonio Saco, fueron cuestionados por no haber condenado la esclavitud y el colonialismo español.

Sin embargo, “la cultura —como escribió la poeta Fina García Marruz— está formada por las cimas y los llanos”. O, como expresó don Fernando Ortiz: “Lo cubano, que es conciencia, voluntad y raíz de patria, surgió primero entre las gentes aquí nacidas y crecidas, sin retorno ni retiro, con el alma arraigada a la tierra. Lo cubano fue brotado desde abajo y no llovido desde arriba”.

En sentido general, la cultura fue concebida por los hombres y los pueblos. Se enriquece constantemente, y continúa siendo un tema de estudio y definiciones que nunca termina.