Las habaneras: un reencuentro con la canción cubana

Kenia Méndez Mederos
14/3/2019

En el marco del Encuentro de Mujeres Creadoras “Ángel y Habanera”, que organiza la cantautora Liuba María Hevia y su proyecto Alma Creadora, se realizó en la tarde de ayer un conversatorio sobre la habanera en la sala Villena de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC). El espacio estuvo a cargo de la musicóloga Nery González Bello y de la propia Liuba, quienes apuntaron que constituía también un homenaje a los 500 años de La Habana y a María Teresa Linares por su profunda dedicación a este género.

Entrega a Liuba María Hevia del diploma que la acredita como miembro de mérito de la UNEAC,
de la mano de Miguel Barnet, presidente de la UNEAC, y del Premio Nacional de Música Guido López-Gavilán.
Foto: Tomada del Noticiero Cultural
 

Según Nery González Bello, el proceso fundacional de la habanera fue paralelo al de la guaracha y la contradanza, y en el género prevalecieron los textos líricos, aunque también algunas canciones de carácter patriótico. La popularidad y la peculiar forma de cantar textos sencillos influyeron en la expansión del género, que llegó a casi todos los países latinoamericanos y a España. Fue en el siglo XIX cuando las habaneras tuvieron su mayor desarrollo en Cuba, mostrando importantes conexiones con el danzón y evolucionando luego a un nuevo estilo de la canción cubana: el bolero.

Liuba María Hevia ha sido una de las artistas cubanas que ha rendido tributo al género: lo hizo en 1995 con una monografía sobre el género, Habaneras en el tiempo, que reunía una serie de importantes obras y luego vuelve a grabar el propio disco en 2004, titulándolo Ángel y habanera. Esta vez incluyó una canción escrita por ella que lleva el mismo nombre del disco y una de Silvio Rodríguez, “En el claro de la luna”. En el encuentro se puedo disfrutar del videoclip de “Ángel y habanera” y de famosas habaneras como: “Mariposita de primavera”, de Miguel Matamoros; “Veinte años”, de María Teresa Vera y “Habaneras”, de Roberto Fonseca.

La cita también sirvió de marco para la entrega a Liuba María Hevia del diploma que la acredita como miembro de mérito de la UNEAC. Este reconocimiento le fue entregado por Miguel Barnet, presidente de la UNEAC, y por el maestro y Premio Nacional de Música Guido López-Gavilán, quienes resaltaron los empeños de la artista por conservar el patrimonio cultural cubano.

Habaneras, tradiciones y valores culturales del género junto a la música de Liuba hicieron de la tarde un perfecto reencuentro con la canción cubana y sus principales exponentes.