Hablar de Vietnam en Cuba equivale a mencionar lazos de amistad de más de medio siglo. En Vietnam hay una parte de la isla caribeña y en Cuba siempre ha existido un fraternal cariño por el pueblo asiático. El pasado martes los lazos fueron más allá de la política o la solidaridad y se estrecharon mediante la cultura.

Con motivo de la visita oficial a Cuba de la vicepresidenta vietnamita Dang Thi Ngoc Thinh y en el marco de los festejos por el 60 aniversario de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones, la Sala Covarrubias del Teatro Nacional acogió la presentación de “Días de la Cultura de Vietnam en Cuba”.

La gala, que mostró lo mejor del arte de este país, fue antecedida por la inauguración de una exposición fotográfica donde puede apreciarse la belleza de la nación y de su gente. Son 25 obras de 18 artistas del lente vietnamitas que revelan desde la óptica fotográfica un Vietnam que ha resurgido de las cenizas, después de la guerra, así como el ave fénix; un Vietnam colorido, llego de hermosos parajes que hoy se consideran patrimonios de la humanidad.

“La cultura acerca a los pueblos, nos integra, posibilita conocernos y entendernos mejor. Cuba y Vietnam somos países lejanos geográficamente, con manifestaciones culturales distintas y es importante que apartemos esas diferencias para conocernos, entendernos y apreciar así la belleza de ambas culturas. Hay que ver detrás de eso el amor entre los dos pueblos”, comentó a La Jiribilla Fernando González, presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, al hacer referencia al papel de la cultura como aglutinador de naciones.

Por su parte, Teresa Domínguez, vicepresidenta del Consejo Nacional de Artes Plásticas, se refirió a la importancia de esta exposición, pues el pueblo cubano no conoce al detalle las tradiciones, las costumbres, ni la cotidianeidad del pueblo vietnamita, y esta es una vía para hacerlo. “Esta exposición muestra lugares representativos en Vietnam, las ciudades, los campos, monumentos y áreas patrimoniales, una riqueza cultural de la cual no teníamos referentes desde el arte”.

La directiva de Artes Plásticas aseguró que esta jornada cultural de solo dos días, es la antesala a una semana de la cultura vietnamita en Cuba, que se piensa concretar para el próximo año y, después, hacer lo mismo en el país asiático.

Más cultura desde Vietnam

Tras la inauguración de la exposición, artistas del Teatro Nacional de Arte Moderno de esta nación, junto a representantes de la cultura cubana, ofrecieron el espectáculo “Los colores de la cultura vietnamita”: una fusión entre el canto, la danza y la música folclórica que muestra los rasgos distintivos de las tradiciones culturales de las tres regiones —centro, norte y sur— de ese país.

Los cantantes Tien Hung y Hue Thuong dieron vida a temas de su país como “Vietnam mi patria”, “Buenos días Vietnam” y “Las melodías de amor en la noche de luna”. Ellos sorprendieron al público cuando interpretaron canciones típicas cubanas, utilizando la lengua de Cervantes. “Rico vacilón”, “Cuba bella” y “Guantanamera” fueron algunos de los clásicos interpretados en la noche.

También se tocaron instrumentos autóctonos de esta nación, como el monocordio Bau, el K´Longput y el T´rung, todos confeccionados con materiales de bambú, que le aportan una sonoridad al fusionarse los tres.

Por su parte, los bailarines interpretaron danzas que son consideradas Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, por su valor tradicional y su aporte a la cultura mundial. Entre ellas destacan “Las muchachas Quan Ho”, un baile folclórico del canto Quan Ho (dúo de amor) de la provincia de Bac Ninh; “Danza de culto real”, con más de 300 años de historia; “Memoria de Cham”, danza antigua de las jóvenes bailarinas de la minoría Cham que radican al lado de las torres erguidas, a lo largo de dos provincias de la región central del país.

Finalmente, “La llama de amor de la montaña”, un baile  apasionado y libre de las minorías étnicas que habitan en la meseta occidental, los cuales danzan y cantan alrededor de las hogueras, recogiendo los frutos de las buenas cosechas y la caza.

Para finalizar la gala, todos los artistas —incluidos la compañía de Danzas Tradicionales JJ y la cantante María Victoria, en representación de Cuba— cantaron y bailaron la “Guantanamera”, canción que identifica a Cuba en cualquier escenario internacional.

Las banderas de Cuba y Vietnam eran agitadas en el escenario, ambos pueblos fueron uno. La gala cultural que unió a dos naciones hermanas concluyó con un homenaje a Ho Chi Minh, “como —cita la canción— Tío Ho estuviera en el día jubiloso de la gran victoria”.