Los museos municipales y provinciales en Cuba: Experiencia enriquecedora para la Historia

Gloria F. Santos Luna
26/3/2021

Cuídese, consérvese y auméntese por los que aquí vivimos actualmente,
y las generaciones venideras al ver salvada de la destrucción lo que es historia del pasado,
lo que ha sido de sus gloriosos ascendentes,
que han de tener para nosotros un pensamiento de máxima estimación,
al mirar este plantel han de recordarnos siempre con gratitud y con cariño

Emilio Bacardí

 

Desde la época de colonial, la creación de museos formó parte del desarrollo cultural de la Isla, y no es hasta finalizado el siglo XIX que se creó el primer museo-biblioteca municipal en la ciudad de Santiago de Cuba, el 12 de febrero de 1899, gracias al interés personal de Don Emilio Bacardí Moreau y el respaldo de un grupo de colaboradores. Muchos fueron los avatares y sacrificios realizados por Emilio, su esposa y sus allegados por mantener tan encomiable obra —la cual Don Emilio no pudo disfrutar a plenitud— y, cuando se fundó oficialmente la sede del nuevo local para el museo en 1928, se decidió que ostentara el nombre del luchador incansable, su principal creador.

Museo Emilio Bacardí, Santiago de Cuba. Fotos: Cortesía de la autora
 

Trece meses después sería creado en la ciudad de Cárdenas el Museo Oscar María de Rojas que también desarrollaría una importante labor en la vida cultural de ese territorio y donde expresara el propio Oscar: “Nacida esta institución, al calor de la Patria cubana, todo cuanto hay en ella corresponde de hecho y de derecho al pueblo cubano. Si por incongruencias del destino desaparece la Patria, desaparecerá también el Museo de Cárdenas, porque sin Patria, ¿para qué queremos el Museo?”.

Después de estas fechas sucedería la aparición de otros museos, pero no es hasta después del triunfo de la Revolución y finalizando la década de los años 70 que se promulgó por parte del Ministerio de Cultura, la creación de diez instituciones básicas en todos los municipios del país, con el objetivo de extender el arte y la cultura hasta los lugares más intrincados e inhóspitos, favoreciendo de esta manera el desarrollo cultural de todos los habitantes en territorio cubano. De estas diez instituciones el museo formaría parte, amparado bajo la Ley #23, de los Museos Municipales, representando un significativo paso en el proceso de institucionalización a favor del rescate, la preservación y la difusión del patrimonio y la identidad cultural local.

Museo Provincial de Sancti Spíritus, Sancti Spíritus.
 

Esta ley aprobada por La Asamblea Nacional del Poder Popular al ser dictada en su segundo “Por Cuanto” refería: “Los museos constituyen centros de estudio, investigación, conservación y exposición de bienes culturales que cumplen una importante función en la difusión de la cultura en general y, en especial, contribuyen al conocimiento de la historia y a la educación patriótica del pueblo”.

Expresaba en su tercer “Por Cuanto”: “En los diferentes municipios es necesario rescatar, ordenar y conservar los bienes museables que reflejan la historia, características y costumbres locales, partes constitutivas de la historia y de la cultura nacional y de las tradiciones de todo pueblo, y es de interés nacional que, a ese fin, se creen museos en todos los municipios de la República”.

Por lo que decidió acordar en su Artículo 1 lo siguiente:

En cada uno de los municipios de la República se creará un museo en el que se conserven y muestren, para su conocimiento y estudio, documentos, fotografías u otros objetos referentes a la historia nacional y local que reflejen las tradiciones del pueblo, los episodios sobresalientes de sus luchas, los hechos y la vida de sus personalidades destacadas en las diversas épocas y lo referente al desarrollo de su economía, su cultura y sus instituciones.

En las capitales de provincia el museo municipal que se cree tendrá, además, carácter provincial.

Una vez aprobada dicha ley, en cada uno de los territorios se comenzaron a dar los primeros pasos para la creación de estos museos. Se inició todo un proceso de rescate del patrimonio atesorado tanto en manos de particulares como estatales, a través de una campaña nacional desarrollada para acometer la tarea y respaldar los fondos que serían custodiados, conservados y preservados por las nacientes instituciones, llegando de esta manera las más variadas y disimiles piezas que mostraban la identidad cultural de cada territorio.

Los museos tuvieron como sedes, sobre todo, inmuebles representativos de sus localidades y en los que se vinculaban sus valores como edificaciones, así como con su Historia. Al ser tenidos en cuenta los aspectos anteriores, pasaron a ocupar un papel esencial en la vida de cada comunidad.

Para uno de los llamados países del tercer mundo esta tarea constituyó, en esa época, un caso sui generis que logró demostrar cómo era posible llevar a cabo tan imponente labor de creación de más de un centenar de museos y cómo estos son la expresión de la cultura y el patrimonio de cada localidad y, a la vez, muestra nuestro acervo nacional.

Los museos municipales, sin lugar a dudas, desde su creación hasta la actualidad mantienen un sostenido trabajo en sus respectivas localidades y representan el 47,21% del total de los museos existentes en el país, poniendo al servicio del pueblo su quehacer cultural.

Museo Provincial La Periquera, Holguín.
 

En el caso de los museos provinciales, clasificados con tipología general al igual que los municipales, como se expresa en la ley 106 en su Sección Segunda, Artículo 12, poseen fondos y colecciones de alto valor y significación para sus territorios.

En algunos casos, estos funcionan como centros rectores de la labor metodológica a nivel provincial, llevando sobre sus hombros la responsabilidad de lograr un trabajo técnico sostenido y el cumplimiento de las leyes, los reglamentos y demás normativas elaborados para tales fines.

Existen doce museos provinciales, de ellos los museos Emilio Bacardí, en Santiago de Cuba; La Periquera en Holguín; el de Camagüey; el de Sancti Spiritus Villa Clara; el Palacio de Junco en Matanzas y el de Pinar del Río albergan un amplio fondo museable con exquisitas colecciones en las que destacan la Historia, las Artes Decorativas, la Pintura, el dibujo y los documentos, entre otras.

Ambas clasificaciones tipológicas responden administrativamente a las Direcciones Provinciales y Municipales de Cultura según sean los casos, así como a los órganos locales del Poder Popular y se subordinan, desde la metodología, a los Centros Provinciales de Patrimonio.

Po otro lado, al formar parte del Sistema Nacional de Museos de la República de Cuba, tienen la obligación y el compromiso de proteger y conservar sus bienes patrimoniales y museables según lo dispone la Ley Nº 1 “Ley de Protección al Patrimonio Cultural” del 4 de agosto de 1977 y su Reglamento el Decreto Nº 118 del 23 de septiembre de 1983.

Los Museos Municipales y provinciales, se han convertido en centros de referencia, en tanto estudian estudian, investigan, conservan, y exponen sus bienes. Así cumplen un importante cometido en la difusión de la cultura en general, pues contribuyen con el conocimiento de la historia y con la educación patriótica del pueblo, de ahí el peso fundamental de los museos como instituciones culturales y como conductores de una ideología bien definida en cuanto a materia de política cultural se refiere.

Museo Municipal Los Palacios, Pinar del Río.
 

Las entidades museológicas municipales y provinciales levan a cabo un amplio plan de actividades sistemáticas con acciones caracterizadas y dirigidas a los diferentes grupos etarios, atienden y responden por el cumplimiento de planes nacionales, así como dedican un espacio diferenciado a todos los niveles de enseñanza y, en algunos casos, se ha logrado mantener las aulas museos que fueran creadas muchos años atrás.

Cabe resaltar que muchos de los inmuebles donde están ubicados tanto los museos municipales como provinciales estuvieron relacionados directamente con destacados patriotas o intelectuales, así como con hechos trascendentales, por ejemplo: Museo Municipal Adela Azcuy Labrador, patriota insigne del territorio viñalero en Pinar del Rio; Museo Municipal de Sagua La Grande José L. Robau López, inmueble donde naciera este miembro del Ejército Libertador; Museo Municipal Casa Natal de Abel Santamaría en Villa Clara; Museo Municipal de Antilla René Ramos Latour; Museo Municipal Casa Jesús Rabíen Baire en Contramaestre, Santiago de Cuba, que fuera la casa de quien también fue miembro del Ejército Libertador; Museo Municipal Los Palacios que tiene como sede la casa de los Hermanos Adrián y Enrique Troncoso, jóvenes revolucionarios, miembros del Movimiento 26 de julio asesinados en el año 1958; Museo Municipal de Guane, que fungía como casa de expertos de la Guerra de Independencia y donde vivieron los dos últimos veteranos de las guerra en esa localidad.

Museo Ignacio Agramonte, Camagüey.
 

También constituyen museos locales algunos sitios que fueron creados para usos específicos tales como cárceles, cuarteles, etc., por ejemplo los museos provinciales de Guantánamo, Camagüey, Villa Clara, Museo provincial Coronel Simón Reyes Hernández, en Ciego de Ávila que su uso original fue una vivienda, pero luego radicó la Comandancia General de la Trocha Militar de Júcaro a Morón, en el caso de los municipales encontramos a Jaruco, Bejucal, Fomento, Matachín en Baracoa.

Otros usos lo son los Centros Obreros que reunían a gremios determinados, en este sector tenemos a los museos municipales Álvaro Reynoso y Valdés en Alquízar y Francisco Fina García en Boyeros.

Resulta meritorio destacar que algunas de estas instituciones museísticas, ya sean municipales o provinciales, ostentan las condiciones de Monumento Nacional o Monumento local. De ellas podemos mencionar como monumentos Nacionales a los museos: provincial La Periquera, Casa de Carlos Baliño (hoy museo municipal), Casa Natal Abel Santamaría en Encrucijada, Villa Clara, Antigua cárcel de Guantánamo (museo provincial), Emilio Bacardí Moreau, Oscar María de Rojas, en Cárdenas, Antiguo cuartel de Caballería de San Luís, hoy museo municipal y que forma parte de la ruta de José Martí en la guerra de 1895 y de sus restos mortales, antiguo cuartel de caballería en Camagüey, hoy museo provincial.

Museo Municipal de San Luis, Santiago de Cuba.
 

Como monumentos locales: La Antigua cárcel de Jaruco con grado de protección 1, hoy museo, Casa natal de René Ramos Latour en Holguín.

Por otro lado, es válido aclarar la existencia de algunos museos que, a pesar de no estar declarados con ninguna de estas dos condiciones, al encontrarse insertados en zonas declaradas asumen de hecho tales condiciones, ejemplos de estos son el Museo Municipal de Sagua La Grande, en el Centro histórico urbano de Sagua la Grande; el Museo Municipal de Regla Eduardo Gómez Luacesen el Sitio urbano de Regla y el Museo Municipal de Guanabacoa, en el centro histórico urbano de la antigua villa de la Asunción de Guanabacoa.

Museo Municipal de Guanabacoa, La Habana.
 

Por último deseo destacar dos aspectos importantes que son la inserción de museos municipales y/o provinciales en algunas redes como la red de instituciones cubanas vinculadas a la investigación y a la conservación y divulgación de la memoria histórica, relacionadas con las acciones del 26 de julio de 1953 —de la cual el Museo municipal Abel Santamaría, en Encrucijada, Villa Clara es miembro— y la Red de Museos y Salas de Arte de la República de Cuba, de la que los museos provinciales de Camagüey y Santiago de Cuba son parte. Así como su presencia en el Registro de Ibermuseos como plataforma comunicativa e interactiva para socializar nuestras instituciones en Iberoamérica.

Finalmente, me gustaría retomar la idea de Marta Arjona Pérez, quien fuera Presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, cuando comparaba la significación que tendría para el desarrollo museológico —a partir de la creación de estos museos— con lo que representó para el sector educacional la campaña de la alfabetización; pues ambas tradujeron en sus empresas el esfuerzo de preparar, capacitar y habilitar a los futuros hacedores de cultura y tradición del país.

 

      Bibliografía

  1. Arjona Pérez M. (1986) Patrimonio Cultural e Identidad. Editorial Letras Cubanas. La Habana.
  2. ___________(2003) Reencuentro. edit. CPPC. Mincult.
  3. García Santana M. M.(1983) La historia de los museos en Cuba, en: Material de Estudio del Instituto Politécnico de Museología, La Habana, Otros.
  4. Resolución No. 38 del 8 de abril de 1981. Ministerio de Cultura, sobre la creación de las 10 instituciones culturales básicas en los municipios del país.  
  5. Decreto No 312 del Reglamento de la Ley No. 106 del Sistema Nacional de museos de la República de Cuba. Publicado en la Gaceta Oficial de la República de Cuba edición ordinaria. Número 24, de fecha 2 de mayo de 2013. 34 páginas.

Fuentes de Internet

  1. http://www.parlamentocubano.gob.cu/index.php/documento/ley-de-museos-municipales/
  2. https://www.gacetaoficial.gob.cu/es/museos

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