“Para defender el amor y la esperanza” a favor del nuevo Código de las Familias, se reunió un grupo de intelectuales y artistas cubanos, este miércoles, en la Sala Che Guevara de la Casa de las Américas. El panel abordó las oportunidades, logros y nuevos retos tras la posible aprobación de dicho cuerpo legal.

A la cita asistieron diversas voces de la sociedad cubana, entre ellas, Yamila González Ferrer, Pancho Amat, Fernando Ravsberg, Laidi Fernández de Juan, Víctor Fowler, Zaida Capote, Kike Quiñones, Miguel Barnet y Abel Prieto. Los oyentes pudieron presenciar una exposición de variados análisis, anécdotas y reflexiones que enriquecieron el debate.

“Un Código que habla del ser humano y propone un nuevo tipo de ser humano”.

Sobre el tema en cuestión, González Ferrer, vicepresidenta de la Unión Nacional de Juristas de Cuba y representante de la comisión redactora del Código comentó que esta es la primera ley en el mundo que tiene entre sus principios la búsqueda de la felicidad y acoge a todas las personas al restar sufrimientos, multiplicar afectos y sumar derechos. De esta manera, el documento desarrolla coherentemente y amplía los contenidos que en materia familiar refleja la Constitución de la República de 2019, aprobada con el 86, 8% de los votos del pueblo. Además, fortalece los paradigmas constitucionales de pluralidad y diversidad familiar, de igualdad y no discriminación y de dignidad humana al ofrecer protección a las diversas formas de organización familiar sin exclusiones.

“Esta es la primera ley en el mundo que tiene entre sus principios la búsqueda de la felicidad y acoge a todas las personas al restar sufrimientos, multiplicar afectos y sumar derechos”.

El documento, por sí solo, ya es una deuda saldada de cara a un marco legal que ampare, proteja, dignifique a las familias en Cuba. Sin embargo, el accionar de actores y mediadores sociales responsables de su ejecución, supone también un desafío a revisar. El objetivo debe traducirse en empeño, trabajo de equipo, pensamiento y cumplimiento de los derechos y las transformaciones propuestas no solo a lo interno de las familias, sino de cara a la sociedad toda.

En opinión de Víctor Fowler, “es un Código que habla del ser humano y propone un nuevo tipo de ser humano”. Imagen: Maite Fernández Barroso

Algunos con sus historias de vida y otros desde la interpretación y reflexión en torno a las propuestas y a sus luchas a favor de la equidad, abordaron la problemática de la familia, la construcción de un nuevo sujeto, más solidario, en la conformación de una nueva sociedad en Cuba.

En opinión del destacado escritor e intelectual Víctor Fowler, “es un Código que habla del ser humano y propone un nuevo tipo de ser humano”, refiriéndose al impacto que tendrá en una estructura social como la nuestra, dicho código, de ser aprobado. Afirma también que “deberán tener una interconexión las instituciones, los educadores y los responsables de la comunicación pública como mediadores de las políticas públicas, y jugarán un gran rol como actores sociales en retroalimentación con las organizaciones políticas y de masas, y con la sociedad civil” para garantizar su puesta en marcha desde el amor y la transformación. “Da igual si se comulga o no con el comunismo, o capitalismo o con determinados sistemas políticos, para defender que los individuos más desvalidos de la sociedad estén defendidos y representados como el resto, de forma que todos tengamos derechos e igualdad de oportunidades”.