Robertico García toma un nuevo camino musical

Ivón Peñalver
10/12/2019

Roberto García, o mejor Robertico, tal y como se le reconoce en el gremio sonoro cubano e internacional, luego de una sólida carrera ha apostado por tomar un nuevo camino auténticamente propio, hecho que se traduce en el próximo lanzamiento de su proyecto musical, Camino Latino (Latin Way).

Por más de 15 años formó parte de agrupaciones como las de Emiliano Salvador, AfroCuba, en tiempos que fuera banda acompañante de Silvio Rodríguez; Amadito Valdés, Buena Vista Social Club acompañando a Omara Portuondo e integrante de Alexander Abreu en Havana D' Primera. Incansable seguidor del trabajo de una de sus grandes influencias, Alexis Boch, con el que continúa trabajando, al igual que con la Academia de Hernán López Nussa, donde ha podido crear para diversos géneros, son referentes que afirman la labor de este cubano bonachón que ha decidido liderar un trabajo independiente que no es más que la sumatoria de toda una herencia musical que hoy muestra con orgullo.

Roberto García. Foto: Internet
 

Sobre la génesis de este proyecto nos comenta Robertico:

Es una idea que me tiene atrapado desde hace mucho tiempo, en primer lugar porque es un compromiso que tengo con mi padre, ya fallecido, de que en algún momento me decidiría por tener mi propio proyecto, solo que para tomar esa decisión tiene que antecederle una preparación y la experiencia necesaria para saber qué se quiere, y confieso que solo ahora lo estoy realmente. Pero además de ello he de agradecer a muchas otras personas que han sido un poco mis motores impulsores, uno de ellos es Robertico Fonseca, con quien trabajo casi todos los años en el Festival de Jazz, y él con su manera de ser tan abierta ,me dijo “tocayo estás mareao” El propio Alexis constantemente me insistía al respecto, en momentos incluso en que me dio bandera libre para asumir la dirección del proyecto, pero no, siempre me sentí bien como instrumentista aunque pudiera mostrar temas propios.

Pero parece que llegó el momento y la esencia, entonces, de Latin Way es ofrecer todo tipo de música latina, por ejemplo tengo temas como Calipso, los Caminos del Cóndor que resume un ritmo andino, Kong Kong que aparentemente no tiene que ver con lo Latino pero al volver al ritmo te das cuenta de que sí tiene lazos sanguíneos comunes. La música latina es la columna vertebral de la propuesta. Ocurre que desde los tiempos de Afrocuba y la propia Academia el núcleo era los ritmos afro, que tampoco dejan de existir ahora para mí, solo que estoy enfocado en ritmos caribeños: merengue haitiano, ritmos de Trinidad Tobago.

¿Qué formato tiene este nuevo proyecto y sobre qué repertorio se propone moverse?

Similar al de Alexis Boch y la Academia, saxo que básicamente uso el soprano y el tenor, percusión, piano, batería, bajo, trompeta, trabajo con los teclados para crear atmosferas diferentes, y trompeta y friscornio que soy yo. Es que ando en busca de una tímbrica entre teclado, trompeta con sordina y friscornio, y el iligüi, un instrumento que quiero comenzar a utilizar aunque es poco conocido por acá.

Estoy muy contento con los músicos que me acompañan: en el saxo Iván Ivanovich, conocido como el Ruso, Pablo Cruz saxo muy joven y excelente, por cierto, Christian, en el drums, Yosvany (El Pity), un tremendo músico en cuanto a creatividad pues puede asumir varias facetas musicales; Iram, conocido como el menor, Augusto en el piano, posiblemente se integre además Rodrigo también en el piano; Roger, el matancero, en el bajo, con quien estoy muy feliz igualmente.

Por otra parte en materia de repertorio muchos de los temas actuales son míos pero además asumo versiones como Imagine de John Lennon, una versión de El Manisero de Eliseo Grenet con un corte muy simpático, lo cual quiere decir que siempre hay una mirada hacia la raíz, porque de ahí parte todo, y luego a crear según las exigencias de los tiempos; eso es una esencia ética a la hora de encaminar el trabajo.

¿Para cuando imagina el estreno de Latin Way?

Todo está dispuesto, y me parece mentira poder decir una fecha así, que será el 14 de diciembre en el Café Miramar a las dos de la tarde en el programa A buena hora de Radio Taíno, justo en el espacio de La Descarga de ese programa. Y posiblemente para la fecha pueda trabajar con Omara Portuondo. Pienso que además puedan estar el Indio, una de las voces de la Orquesta Aragón, y otros invitados que aún no puedo asegurar, pero de lo que estoy seguro es que será una fiesta.

Roberto García junto a Omara Portuondo. Foto: Cortesía de la autora
 

Y en medio de los preparativos, que son muchos para la ocasión, pues representa el punto de partida hacia nuevas proyecciones, se respira una interesante comunión generacional dentro de este proyecto, al respecto Robertico asegura:

Sí, es un fenómeno muy bonito el que está ocurriendo; estoy trabajando con jóvenes que fueron mis alumnos, desde los talleres que aun ofrezco en la Escuela Nacional de Arte, así que lo primero que siento es un gran orgullo de ver el resultado.

El otro día yo le decía a Cristhian, crees que me puedas ayudar en algo que aún faltaba, y él estaba “enredado” con compromisos, lo sé, pero inmediatamente me dijo: como no lo voy a ayudar profe, con todo lo que nosotros le debemos a usted. Eso, te confieso, me emocionó mucho pero a su vez me dio la confianza de que estoy rodeado de excelentes músicos que a la par son las personas que quiero ver seguir creciendo a mi lado como buenos seres humanos.

Pero eso es un fenómeno evolutivo feliz que en la música es constante, recuerdo que al comenzar a trabajar en el Buena Vista Social Club me encontré con músicos que siendo niño los iba a ver tocar con la Orquesta de Música Moderna y fueron compañeros de trabajo de mi papá, que bien está destacar era el reconocido bongosero Roberto García, y te repito con colegas de él pude compartir escenario, como por ejemplo Braulio Hernández (Babín), he trabajado con Emilio del Monte padre e hijo, y el primero de ellos, por ejemplo, fue colega de mi papá en la Orquesta Sabor de Cuba, de Bebo Valdés.

Y a propósito de Latin Way, Robertico Garcia no descarta la posibilidad de invitar a su proyecto a vocalistas jóvenes que le apasionan como intérpretes, entre ellas Zule Guerra y Luna Manzanares, aunque ahora mismo sus expectativas se centran en que se conozca su música y llegue a dónde tenga que hacerlo. No obstante, nos adelanta con beneplácito que desde ya anda en conversaciones acerca de una próxima propuesta discográfica. Mientras el momento llega, podremos disfrutar de un demo donde Latin Way mostrará sus credenciales.

Y como Robertico García no conoce la palabra descanso, se refiere igualmente a una propuesta discográfica donde su música aparece respaldada por un quinteto de cuerdas, lo cual quiere decir que entre sus anhelos está desdoblarse también para un trabajo con formato sinfónico.

Despidiendo el año, Robertico García se presentó el 4 de diciembre en el concierto de Haydée Milanés en el Teatro Nacional de Bellas Artes, ya en la segunda quincena de diciembre trabajará con Roberto Fonseca, y en los finales de año, junto a Emilio Vega en un proyecto discográfico. Así cierra un ciclo en 2019 y abre otro con un camino musical impregnado de su sello. Un sello que, desde la cubanía, funde ritmos del Caribe que conforman su discurso musical. Un camino latino que nace y se afirma en este tiempo y pretende conducirnos hacia otros.