Con la certeza de que “un grano de poesía sazona un siglo” al decir de José Martí, más de 200 poetas participan en la edición 29 del Festival Internacional de Poesía, que se celebra desde el 22 hasta el 27 de mayo con acciones poéticas en varias provincias del país.

Dedicado en esta ocasión al aniversario 170 del natalicio de José Martí, al centenario de la poetisa cubana Fina García Marruz y a los 30 años de la Colección SurEditores, este evento, de gran repercusión mundial, “es una acción de promoción de la poesía, de sus autores, de interacción entre intelectuales de diferentes países y de nuestra propia nación. En su contexto salimos a hacer un ejercicio de comunicación más que de variedades; donde hacemos una propuesta para interactuar con estudiantes, trabajadores, comunidades y, en general, con ese público lector activo o pasivo que tiene la poesía”, dijo en exclusiva el poeta y ensayista Karel Leyva Ferrer, coordinador general del Festival.

Avalado por el mundo cultural y poético que le rodea desde su nacimiento, Karel Leyva Ferrer considera que la poesía es “una manera de vivir, pensar y actuar”. Imagen: Tomada de Trabajadores

Seguidamente añadió que en ocasiones las personas “no se percatan de cuánto les gusta un poema porque han dejado de escucharlo o leerlo habitualmente. Durante la celebración del Festival, sin embargo, observamos que la gente acude tanto a una universidad, a una tabaquería, como a leer en una entidad ubicada en un determinado barrio. También en los espacios tradicionales como la Uneac y la Casa del Alba Cultural, entre otras instituciones que acogen las voces, los protagonistas de siempre. Entonces empiezan a descubrir ese otro gusto, esa otra posibilidad de sentir en la piel, en el alma, el decir poético que les llega desde distintas regiones del mundo”.

Una gran cantata poética iniciada en la oriental provincia de Granma y que se extendió hasta Pinar del Río en la parte más occidental del país, como tributo a la caída en combate de José Martí el 19 de mayo, sirvió de prólogo a esta nueva edición del Festival Internacional de Poesía.
“Aunque en homenaje a nuestro Héroe Nacional hemos desarrollado durante todo el año diversas acciones, que precisamente comenzaron en el mes de enero”.

Junto a España, Argentina y México, países que históricamente participan con las delegaciones más importantes y numerosas, se dan cita en este esperado encuentro poetas de Chile, Venezuela, Colombia, Brasil, Estados Unidos y por primera vez asiste una representación de Kurdistán.

“Desde los inicios del Festival hemos tenido el privilegio de contar con la asistencia de prestigiosos, especiales y entrañables poetas, no pocos de ellos procedentes de México; por esa razón, algunas ediciones han estado dedicadas a los poetas de pueblos originarios mexicanos que han contado con la presencia de grandes voces.

“En total —refiere Leyva— unos 60 poetas extranjeros estarán presentes en La Habana. Mientras que una treintena, oriundos de Noruega, Bangladesh y China, participarán de manera virtual”.

Este evento, de gran repercusión mundial, “es una acción de promoción de la poesía, de sus autores, de interacción entre intelectuales de diferentes países y de nuestra propia nación”.

Asegura su coordinador general que durante la celebración del Festival “habrá muchas lecturas de poesía”, que tendrán, entre otras sedes, el Centro Cultural Dulce María Loynaz, la Casa del Alba Cultural, el Centro Fidel Castro, la Casa de las Américas y la emblemática sala Rubén Martínez Villena de la Uneac. Asimismo, el Centro Histórico de la Habana Vieja; acogerán a representantes de esta expresión literaria la Casa de la Poesía, la biblioteca Fayad Jamís, el Convento de San Francisco de Asís, la casa Benito Juárez y el museo José Lezama Lima.

Significativos intercambios y encuentros entre estudiantes y poetas tendrán lugar en centros estudiantiles, desde la enseñanza primaria hasta varias facultades universitarias. “Centros docentes donde se concentran centenares de jóvenes que aun cuando no practican ni conocen la poesía y tampoco son sus seguidores, en la práctica son amantes de este género y que, sin percatarse, lo han consumido muchas veces de manera indirecta a través de la música interpretada por iconos de su generación como el dúo Buena Fe, David Torrens, Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, Liuba María Hevia, por solo citar algunos. Y también, por qué no, la poesía que nace de la música alternativa.

“Uno de los propósitos del evento es mostrar el latir de un poema, cómo nace, cómo se hace, cómo se interpreta. La segunda parte sería, según los teóricos, cómo se puede construir un poema. Y aunque nos parezca algo efímero, que no hemos logrado nada, las experiencias vividas nos han demostrado que vamos dejando huellas, que vamos sembrando pequeñas raíces en esos jóvenes”.

“Desde los inicios del Festival hemos tenido el privilegio de contar con la asistencia de prestigiosos, especiales y entrañables poetas”. Imagen: Tomada del perfil de Facebook de Karel Leyva

Entre las actividades más sobresalientes que se han desarrollado durante el evento, Ferrer Leyva destacó la inauguración del Festival con una primera lectura de poesías en la sala Villena, a cargo de reconocidos poetas nacionales y foráneos.

El programa contempla igualmente la inauguración de exposiciones de artes plásticas, presentaciones de libros tanto en formato impreso como digital, conferencias, charlas, homenajes y momentos especiales protagonizados por laureados solistas y agrupaciones musicales.

“En el transcurso de estos días de Festival tendremos la suerte de interactuar con proyectos de agrupaciones de poetas. Uno de ellos es, por ejemplo, el proyecto cultural Sur. Este incluye no solo a poetas, también artistas de varias manifestaciones, quienes desde hace casi tres décadas gestan un festival programado para el mes de mayo de apoyo a Cuba y a sus principios, a sus acciones y a la permanente lucha del pueblo cubano contra el bloqueo. Llaman a este evento Palabra en el mundo. Mientras nosotros acá concebimos una gala, una velada, en la Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís, que resulta una especie de clausura de ese encuentro y a la que hemos denominado Palabras del mundo. Es decir, el mundo que llega a Cuba y canta y dice. En esa actividad nos proponemos casi siempre que los poetas invitados hablen en sus propias lenguas, sin la intervención de traductores”.

Un Laboratorio Internacional de Escrituras, presidido por “el extraordinario poeta, soñador y gestor cultural Antonio Nazzaro”, está incluido del mismo modo en el programa del Festival. “En este espacio dedicaremos momentos a la literatura brasileña contemporánea y también concebimos otros importantes y necesarios análisis como lo que se está escribiendo actualmente para niños y jóvenes. Asimismo realizaremos un acercamiento al tango, la trova y la poesía”.

“La poesía está en una conducta, en una actitud ante la vida”.

Precedido de un recorrido por el Centro Fidel Castro, esta institución acogerá el Encuentro de Poetas en Defensa de la Humanidad. Los participantes, a través de las redes, “darán a conocer sus poesías, expresarán sus pensamientos. Y en ese propio Centro, el último día del festival, cayendo el sol, estaremos leyendo poesías por la paz”.
Y porque la poesía, en opinión de los organizadores de este trascendental evento, “tiene mucho por darnos todavía”, su magia se extenderá también a hogares de ancianos, tabaquerías, comunidades y barrios enclavados en la periferia de la capital. Justo en estos lugares, “cuando hacemos poesía con proyectos que han interactuado en el festival, experimentamos la satisfacción de que las personas escuchan, reflexionan y cuestionan. Eso para quien crea, dice o escribe, para quien defiende la poesía, es el mayor premio”.

Avalado por el mundo cultural y poético que le rodea desde su propio nacimiento, Karel Leyva Ferrer considera que la poesía es “una manera de vivir, de pensar, de actuar”. A mi modo de ver, la poesía no está en los gráficos que trazamos sobre un papel. La poesía está en una conducta, en una actitud ante la vida. Está en la manera en que preferimos asumir lo bueno y lo malo. Que uno pueda escribirla o no es otra cosa. Que uno pueda versificar o no es igualmente otra cosa. Generalmente se hace difícil retratar esa imagen, ese sentimiento que ha provocado un cambio espiritual en ti. Pero la poesía, reitero, es eso: una actitud ante la vida”.

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