Una Feria millonaria y para el Pueblo

Juan Rodríguez Cabrera
7/2/2019

Discurso pronunciado por Juan Rodríguez Cabrera, Presidente del Instituto Cubano del Libro y del Comité Organizador de la 28 Feria Internacional del Libro, Cuba 2019.

El acto fue presidido por Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros; Esteban Lazo Hernández, Miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular; José Ramón Balaguer Cabrera y Víctor Gaute López, Miembros del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.

Asistieron también a la ceremonia los compañeros Luis Antonio Torres Iríbar, Miembro del Comité Central del Partido y Primer Secretario del Comité Provincial de La Habana; Alpidio Alonso Grau, Ministro de Cultura; Miguel Barnet Lanza, Miembro del Consejo de Estado, del Comité Central del Partido y Presidente de la Uneac, y Eusebio Leal Spengler, Miembro del Comité Central del Partido e Historiador de la Ciudad de La Habana y Abel Prieto Jiménez, Director de la Oficina del Programa Martiano y Asesor del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros.

El País Invitado de Honor estuvo representado por el Señor Azzedine Mihoubi, Ministro de Cultura de la República Argelina Democrática y Popular; y el Excelentísimo Señor Muhammad Achache, Embajador de la República Argelina Democrática y Popular en Cuba.

Asistieron también al acto varios representantes del Cuerpo Diplomático acreditado en Cuba, así como numerosos escritores, artistas y dirigentes cubanos y de los 44 países asistentes al evento.

Febrero nos trae cada año uno de los eventos culturales más trascendentes y populares de nuestro país: La Feria Internacional del Libro, que inauguramos hoy y que recorrerá la nación, para concluir el 14 de abril en la heróica ciudad de Santiago de Cuba. Con su esencia popular y familiar, la Feria extenderá su presencia a todas las provincias, llegando a múltiples barrios e instituciones laborales, culturales y estudiantiles.

Un país bloqueado durante más de medio siglo por el imperio más poderoso que ha conocido la humanidad, con lógicas limitaciones económicas, organiza cada año esta fiesta de las letras, para el público de todas las edades y para escritores, editores, promotores, libreros, bibliotecarios de Cuba y de otros muchos lugares del mundo.

Todos juntos, como símbolo de la solidaridad y de la unidad, en defensa de la verdad, de la cultura y del futuro de nuestros pueblos, sean bienvenidos a nuestra pequeña Isla del Caribe, que los abraza y que desea para todos una estancia llena de felicidad.

Más allá de la retórica vacía que hoy llena el discurso de los que tienen dinero solo para gastar en fomentar la guerra, la destrucción y el hambre, empujando al planeta hacia el caos, Cuba, alzando las banderas de la libertad, de la independencia, de la paz y de la justicia; con el ejemplo de Fidel, más presente que nunca en el corazón de su pueblo y en el de muchos que en el mundo no se han plegado a la desesperanza, hace realidad este encuentro que junta voluntades y mira al futuro con el optimismo de los que sí creemos que un mundo mejor es posible, conscientes de que para lograrlo, hay que luchar, y jamás claudicar.

Los enemigos de este país no entienden, ni quieren entender que tenemos sobradas razones para que el próximo 24 de febrero demos un rotundo sí a la nueva Constitución cubana, expresión de la participación y la voluntad soberana del pueblo. Bien sabemos que ella es garantía para seguir adelante, construyendo el país que soñó Martí y que Fidel nos legó tras la batalla y el sacrificio por más de un siglo y medio de los mejores hijos de la Patria.

Lejos de separar, aislar, cerrar puertas o edificar muros, la cultura cubana, y en especial el libro, buscan sobre todo abrir sus páginas a los lectores que cada año colman de alegría estos espacios del saber.

La vigesimoctava Feria Internacional del Libro de La Habana tiene a la hermana República Argelina Democrática y Popular como País Invitado de Honor. Su heroico pueblo alcanzó su independencia el 5 de julio de 1962. Desde el 27 de junio de 1961 Cuba había sido el único país del hemisferio occidental en reconocer al Gobierno Provisional de la entonces República Argelina.

No es posible escribir la historia de estos lazos de hermandad sin mencionar la activa presencia del inolvidable Guerrillero Heroico, Ernesto Che Guevara, en Argelia, y su contribución al fortalecimiento de esos vínculos indisolubles, forjados en la lucha común contra el imperialismo, el colonialismo y el neocolonialismo. El Comandante en Jefe fue el principal artífice de una amistad inquebrantable y estuvo junto al pueblo argelino en múltiples ocasiones. En 1972 realizó un extenso recorrido, testimoniando su amistad imperecedera. En 1973 participó en la IV Cumbre de los Países No Alineados celebrada en Argel, donde Cuba se sumó al reclamo de ese cónclave de romper relaciones con el Estado sionista de Israel.

El Presidente Ahmed Ben Bella, en gesto solidario, visitó nuestro país en vísperas de la Crisis de Octubre. De igual forma, Houari Boumedienne y el actual Presidente Abdelaziz Bouteflika han dado continuidad a una entrañable amistad con nuestro pueblo.

Los primeros estudiantes extranjeros que recibió Cuba después del triunfo, fueron argelinos, incluso, antes de lograr la independencia definitiva de su país.

La primera Brigada Médica Internacionalista Cubana llegó a Argelia en mayo de 1963, conducida personalmente por el compañero José Ramón Machado Ventura, en aquel entonces, Ministro de Salud Pública, hoy, Segundo Secretario del Comité Central del Partido.

El primer contingente militar internacionalista cubano, encabezado por el Comandante Efigenio Ameijeiras, viajó a Argelia en octubre de ese mismo año, para contribuir a preservar la integridad territorial y la independencia definitiva de nuestros hermanos.

En cada batalla por romper definitivamente el oprobioso bloqueo de Estados Unidos y sus aliados contra Cuba, el apoyo de Argelia jamás ha faltado.

Hoy las relaciones políticas, económicas y de colaboración se han fortalecido, de lo cual es expresión la presencia de más de 900 médicos y paramédicos cubanos en cuatro ciudades de esta hermana nación.

La delegación que representa al País Invitado de Honor, ha llegado a nuestra capital en el año del 500 aniversario de su fundación, con todo el potencial de su rica cultura, con diversas manifestaciones artísticas y literarias, con un mensaje de pueblo a pueblo que ensancha nuestros corazones y nos da la oportunidad de reafirmar las históricas relaciones de cooperación en múltiples esferas, consolidándolas y proyectándolas hacia el futuro.

Deseamos expresar nuestro más sincero agradecimiento al Señor Azzedine Mihoubi, destacado intelectual y Ministro de Cultura de la República Argelina Democrática y Popular, uno de los principales artífices de haber logrado crear todas las condiciones para tenerlos entre nosotros, con una amplia representación de las artes de su país. A la delegación argelina la recibimos con los brazos abiertos, como a verdaderos hermanos que han venido a compartir en nuestra casa.

También dedicamos esta Feria a un escritor e intelectual que ha llegado con su obra mucho más allá de nuestras fronteras: Eduardo Heras León, narrador, periodista, crítico, Maestro de Juventudes, Premio Nacional de Edición, Premio Nacional de Literatura, fundador y Director del Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso, un hombre de esos que ha multiplicado su tiempo, no solo para dejar en sus letras el testimonio de una época, sino también, y muy especialmente, para vivir junto a su pueblo, en el corazón de los que lo admiramos, dentro y fuera de su tierra natal. Él no solo ha sido un soldado de las letras, sino que desde las milicias combatió en Girón y en cada batalla que Cuba ha dado por su verdad y su cultura. Cada libro suyo, estudiado con esmero por sus seguidores, testimonia un hito de la historia reciente. Por esta y otras razones, además de un reencuentro con su obra, esta oportunidad significará tener al Chino Heras, con su magisterio impecable, recorriendo toda Cuba.

Es nuestro objetivo que en esta edición de la Feria los lectores cubanos y nuestros visitantes disfruten de la buena literatura, no solo nacional sino de la editada por casas de África, Asia, América y Europa. Celebrar jubilosamente el 60 aniversario de la Revolución cubana y otros hitos de nuestra historia, reconocer a los mejores expositores, entregar los Premios Nacionales de Literatura, Ciencias Sociales y Humanísticas, Edición y Diseño, La Puerta de Papel, El Premio del Lector, de la Crítica Literaria, devendrán momentos inolvidables. Favorecemos la lectura a través de nuevos soportes, redimensionamos el área de actividades con niños y adolescentes y El Salón Profesional del Libro, que congrega a importantes invitados y otros eventos en torno a la edición, las bibliotecas y librerías. Todo esto convierte a la FILH 2019 en un enclave cultural, no solo destinado al libro. Sumemos las presentaciones de nuevas obras y espacios como las subsedes, caracterizados para diversos públicos y en las que habrá eventos de alto nivel profesional y académico, con una significativa presencia de los intensos programas del autor homenajeado y el País Invitado de Honor.

En este diálogo intercultural participan, además de editores y autores cubanos, más de 400 escritores, artistas, editores, distribuidores y directivos de gremios y asociaciones que representan a 44 países. La nutrida asistencia de invitados nacionales y extranjeros confirma otra vez que la Feria es de los eventos culturales más importantes del área, por la masividad, el entusiasmo de su público, y la calidad y amplitud de su programación.

Como en ediciones anteriores, la Feria se organiza para favorecer el acceso de los más jóvenes a la lectura. La encuesta más reciente del Observatorio Cubano del Libro nos revela la prioridad que muchos dan a la lectura en tablets, celulares y otros dispositivos electrónicos: Cubadigital vuelve a ser un espacio expositivo y comercial de amplias perspectivas. Otros sitios han sido posicionados para promover el acceso a productos digitales a partir de las descargas o el intercambio de libros. En momentos en que la dirección del país impulsa la informatización de la sociedad, el acceso a las aplicaciones y soportes electrónicos ha sido una de las políticas de lectura que instrumentamos durante el año, a partir del nacimiento del proyecto hecho realidad “El libro del mes”, que comenzó con Ismaelillo, de José Martí y durante meses ha dado a los lectores, textos de alta jerarquía literaria.

Para celebrar esta cita anual, unieron esfuerzos, como es ya una práctica establecida, el sistema editorial, la industria poligráfica nacional, instituciones culturales, académicas y organismos de la Administración Central de Estado. El esfuerzo de muchos posibilita que se pongan a disposición del público a lo largo del país más de 4 000 títulos y de 4 millones de ejemplares, significativa oferta que sustentará la Feria y sus programas en otras 15 ciudades del país, hasta su culminación en abril, en Santiago de Cuba.

Como cada año, Fidel nos conduce en este empeño. Aunque en su proverbial modestia no se considerara un autor, él legó páginas indelebles de la historia, de las que habrá significativa presencia en estas jornadas.

Fidel soñó esta Feria, quizás desde sus batallas en época de estudiante, en el exilio, durante el presidio en Isla de Pinos, mientras se acompañaba por algunas de sus obras preferidas, en las difíciles condiciones de la guerra en la Sierra Maestra. Imaginaba a todo su país con acceso a lo mejor de la literatura de todos los tiempos.

La Revolución cubana es Fidel, porque es un pueblo entero quien le sigue. Es la respuesta definitiva de los que decidimos acompañarlo por siempre.

Declaro entonces inaugurada la vigesimoctava Feria Internacional del Libro, La Habana 2019.

Muchas gracias.