La oportunidad de volver a conversar con la historia a través de la fotografía y de acercarnos al líder de la revolución cubana y conocer lo humano en él, es la propuesta que Alex Castro (su hijo) lleva a la galería El reino de este mundo, de la Biblioteca Nacional José Martí, con la exposición El rostro de la historia.

En exhibición durante los meses de agosto y setiembre, la expo está compuesta por más de 10 fotografías de Fidel Castro Ruz, que revelan al hombre que no conocimos, más allá de la foto heroica.

“Ese rostro de la historia tiene un nombre, es la historia que se construyó desde lo más íntimo del sentimiento y del pensamiento de Fidel; desde su vida más familiar, personal, y me refiero a la foto en la cual está el hombre, en su sonrisa, en sus gestos, el que realmente nos convocó y nos llevó a todos a esta gloriosa revolución”, expresó Eduardo Torres Cuevas, director de la Biblioteca durante la inauguración de la exposición.

La muestra fotográfica invita a fijarse en los pequeños detalles que transmiten las imágenes, las manos, la mirada y el rostro del Comandante en sus diferentes visiones. Al decir de Eduardo Torres Cuevas ahí está el modo en que nos llega su mensaje, la manera en que vamos a sentirlo como realmente es para los cubanos.

La vida cotidiana y la modestia que lo caracterizó siempre están reflejadas en las fotos. Alex Castro invita no solo a ver la imagen del líder, sino la de esa persona que fue cercana a él. Exhorta a acercarse a la obra y al ver los diversos rostros, recordemos la historia del pueblo cubano y la universal.

“Lo que deseo con la expo es que las personas vean la historia universal a través de él, que representa el símbolo de resistencia, de progreso para la humanidad en ese sentido. Quiero que lo vean no solo como un estadista, un líder, sino que vean también la parte humana de esa persona que ha sido un baluarte del movimiento progresista en el mundo entero”, dijo Alex Castro.

Además opinó que ahora vemos al Fidel más humano, al guía que salió del pueblo y tuvo sus preocupaciones, participó en la guerra, sufrió cárcel e intentos de atentados, como actualmente lo sufren los líderes progresistas del mundo. “Él no nació con un uniforme verde olivo, es la persona normal, la que encontramos a diario y la que supo dirigirnos hacia el progreso que siempre avizoró”, afirmó Castro.

Todas las fotografías tienen un significado para el autor. Algunas más expresivas que otras, pero entre tantas escoge aquellas en la que se ve ocupado, leyendo, estudiando, haciendo bromas, riéndose y pensativo. Solo hay una foto en la que está hablando al público. Esa, junto a las demás, resume la vida cotidiana, lo humano de Fidel Castro Ruz.