A punto de estallar la fiesta por el bardo mayor

Danielle Laurencio Gómez
27/6/2019

Llega junio y en Las Tunas se afinan guitarra, laúd y tres; la finca El Cornito viste sus mejores galas y cantores de las más autóctonas tradiciones bucólicas se reúnen para confirmar, a esta tierra, como el epicentro de la cultura campesina cubana.

La Jornada Cucalambeana, durante 52 ediciones, ha defendido las más autóctonas
tradiciones bucólicas de Cuba. Fotos: Yaciel Peña de la Peña

 

El motivo: homenajear a Juan Cristóbal Nápoles Fajardo (El Cucalambé), quien por su impronta dentro del género de la décima se convirtió en el poeta popular más importante del siglo XIX y a quien se le rinde tributo hace ya 52 ediciones con la celebración de la Jornada Cucalambeana.

Por eso desde la apertura de la jornada, hasta el próximo 1ro. de julio, fecha en que se celebra el aniversario 190 del natalicio del bardo, Las Tunas se engalana con el agasajo que representa defender el punto cubano, declarado en 2018 por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

Otra vez la finca El Cornito, lugar desde donde el poeta compuso la mayoría de sus obras y donde vivió junto a su amada Rufina, será el escenario principal de la Jornada, la cual se distingue por una fuerte apuesta por el movimiento de artistas aficionados y el reconocimiento a las más de 300 cucalambeanas de base que marcaron las pautas del evento nacional.

Inaugurado entonces el jolgorio, serán bienvenidos a la Cucalambeana el pueblo tunero, invitados de varias provincias y las delegaciones de una decena de países, oportunidad para compartir en torno a la obra que Juan Cristóbal cultivó a orillas del Río Hormigo y que permanece viva estos días.

Agrupaciones musicales como el Septeto Armonía, de Cienfuegos, y la Orquesta de Cuerdas, de Artemisa; el Conjunto Artístico Maraguán, de la Universidad de Camagüey, y otros exponentes del más puro son cubano, se sumarán al talento de las Casas de Cultura y a la Brigada de Instructores de Arte José Martí, en un despliegue total del arte de los más de 350 aficionados que acudirán a la cita.

Los bailes tradicionales representan una de las más valiosas propuestas de la Jornada.
 

A propósito de esta singularidad, Benerado Segura Montero, director del Centro Provincial de Casas de Cultura, declaró a La Jiribilla que además de las agrupaciones mencionadas, estarán también Aires de Bahía, de Nuevitas, Camagüey, y el conjunto músico-danzario Colibrí, de Buey Arriba, Granma.

“En los artistas aficionados está la fortaleza de poder desarrollar un evento como este, gracias al trabajo de las 14 casas de cultura que componen el sistema y que dan vida a algo tan identitario como es la Jornada Cucalambeana, por eso seremos los responsables también de protagonizar la gala que rendirá homenaje al aniversario 60 de la firma de la Ley de Reforma Agraria, uno de los motivos de la Jornada, y la Gala infantil que clausura este acontecimiento cultural”.

Pero uno de los mayores regalos resulta la presentación del Septeto Santiaguero como parte de su gira nacional, ocasión en la que presenta en vivo los últimos discos producidos por la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (EGREM), a la cual la Jornada también rinde tributo en su aniversario 55.

Al unísono se desarrolla el XXI Coloquio Iberoamericano: Décima y Verso Improvisado, encuentro en el que investigadores docentes y culturales de Pinar del Río, La Habana, Mayabeque, Matanzas, Sancti Spíritus, y otras provincias, debatirán alrededor de 27 ponencias que pasarán a engrosar la valiosa bibliografía oral y escrita recopilada por la Casa Iberoamericana de la Décima durante más de 25 años.

Además de la notoriedad que le imprime al evento la participación de delegaciones  de México, Italia, Panamá, Chile, Colombia, Argentina, España, República Dominicana y Honduras, esta campiña se privilegia con la presencia de importantes figuras que defienden las tradiciones campesinas, como son Tomasita Quiala, Emiliano Sardiñas, Nelson Domínguez y El Jilguerito de Cienfuegos.

Y con la certeza de lo bien que han defendido estas y otras personalidades la obra del Cucalambé, del Indio Naborí, y otros, se fomenta este arte en las más nuevas generaciones con la celebración de los concursos Cucalambé y Glosa, de poesía escrita; y el Justo Vega, de improvisación.

Los talleres de repentismo infantil garantizan la formación de las nuevas generaciones.
 

Lo cierto es que reconocido como el representante más importante de la espinela (malara) en el panorama folclórico cultural cubano, Juan Cristóbal Nápoles Fajardo no solo escribió décimas, sino también sonetos, letrillas, epigramas y romances; pero la Jornada Cucalambeana, además de privilegiar la música de la campiña, mantiene vivos otros espacios para las ferias de artesanía, los juegos y platos tradicionales y las canturías entre repentistas de diferentes generaciones.

Y aunque la décima vino desde Islas Canarias, se aplatanó en este archipiélago antillano y vino a tener su mejor cuna en Las Tunas; con cada edición de la Jornada Cucalambeana apunta a lo más hondo de la idiosincrasia nacional, con solo lucir un sombrero de yarey, escuchar una seguidilla o esperar la elección de la Flor de Birama, o quizás, con solo escuchar los acordes de guitarra, laúd y tres.

(ACN)