En cada Feria del Libro, tanto en la edición internacional celebrada en La Habana, como en las citas provinciales, las publicaciones de Ácana sobresalen por la variedad de títulos y por lo atractivo de sus propuestas, siempre en función de estar disponible para satisfacer a los más diversos intereses del público.

Uno de los elementos que más engalanan su quehacer es la osadía constante de reeditar textos de múltiples autores cubanos, a la par que acoge a otros nuevos; esta vez cuenta con unos 15 en total como novedades para la edición 27 de la Feria Internacional del Libro, a desarrollarse entre el 1^ro y el 11 de febrero en la capital.

Es ese el caso de Cartas de viaje, una compilación de la investigadora lugareña Olga García Yero sobre la obra de la patriota y periodista camagüeyana Aurelia del Castillo; Las oscuras leyendas de Chano Pozo de Ricardo Oropesa y el Cuaderno de historia principeña 15, proyecto que desarrolla la Premio Nacional de Historia 2015,  Elda Cento Gómez, entre otros.

Según señaló Yuslema Cabrera Rossel, jefa del departamento de promoción en esa institución, se presentarán y comercializarán títulos historiográficos,  de autoayuda, cocina e investigación sociocultural.

De igual forma los más pequeños de casa siempre han estado en la mirada de Ácana, pues son varios los libros que anualmente publica dirigido al público infantil.

Entre las más recientes propuestas estuvo Mentiras piadosas, toda una curiosidad editorial porque devino compilación de cuentos infantiles escritos por niños, realizada por Odalis Calderín y Mayelín Portales, así como Última partida del Pequeño Príncipe, de Alberto Rodríguez Copa, premio Emilio Ballagas 2013.

Las publicaciones de la editorial Ácana destacan por la variedad de títulos
y por lo atractivo de sus propuestas. Foto: Rodolfo Blanco Cué
 

Ácana puertas afuera

Pero el accionar de esta entidad siempre se ha caracterizado por ir más allá de las publicaciones, dándole paso también a la labor de promotores culturales y los propios escritores y poetas que integran su catálogo.

“En Camagüey existen 36 peñas literarias, de las cuales 12 se desarrollan para los más pequeños, principalmente en las escuelas y los fines de semana en la librería Antonio Suárez, ubicada en el paseo peatonal de la Calle Maceo, del Centro Histórico de la urbe”, comentó Yenisleidis López Delgado, especialista en promoción de la institución.

Los pioneros camagüeyanos Maidelis Reyna y Enrique Lazo, de quinto y sexto grado, respectivamente, son de los infantes que reconocen el carácter instructivo de las actividades que desarrolla Ácana, las cuales, además de divertidas, mediante juegos de participación motivan el interés por la lectura y la creación de textos.

A esas acciones se suma el tradicional Sábado del Libro, una vez al mes, espacio donde la presentación de nuevos títulos es el plato fuerte, además del intercambio entre los intelectuales y el público.

Numerosos son los lauros que ostentan textos nacidos de la labor de la editorial  agramontina, entre ellos el Puertas de Papel, galardón que otorga el Instituto Cubano del Libro a editoriales y sus especialistas en esa área, diseñadores y escritores por la constancia y calidad de su trabajo.

Por casi 28 años, Ácana" ha permitido que los camagüeyanos puedan hablar con orgullo acerca de su labor y el hecho de poder estar representados en cada evento intelectual del país, sin dudas, otro aspecto que refuerza el ser merecedores de ostentar la condición de cuna de la literatura cubana.