La cubanía es transversal en su obra, muchas veces su motivación para crear y regalar arte. En Cuba está y a Cuba se debe.

La obra de Alberto Lescay es completamente auténtica, desde sus inicios hasta los tiempos más recientes. Este hombre, que ha acompañado a un país entero durante tantos años, recibió este martes el Premio Nacional de Artes Plásticas 2021, en el Museo Nacional de Bellas Artes.

“Agradecer a mi familia, amigos, a Fidel Castro, porque sin él no estaría parado aquí. A mis maestros, que son muchos, y a todos los que han pensado que mi obra es merecedora de este premio tan alto”, declaró Lescay.

La obra de Alberto Lescay es completamente auténtica, desde sus inicios hasta los tiempos más recientes.

“Cuba es la Isla de la música, la danza; también es la Isla de las artes plásticas. En nuestro país hay una fortaleza de las artes visuales, por lo tanto considero que resulta muy difícil para el jurado a la hora de decidir por un artista. Nunca pensé, ni pienso en premios, pero este me ha conmocionado, me registra mucho”.

En palabras de Rafael Acosta, Premio Nacional de Ciencias Sociales, Lescay emplazó trabajos propios en diferentes países, demostrando una vocación artística ambientalista que no conoce fronteras. Su nombre está, junto al de Rita Longa y José Villa, entre los escultores con mayor número de emplazamientos de obras en la historia del arte nacional.

“Se dice que el Premio es por la obra de la vida, que continúa; no los voy a defraudar”.

“No quiero dejar de mencionar su labor pictórica y de dibujo, quizás algo relegada por la contundencia de lo tridimensional. Pero Lescay ha sido un reconocido pintor, mayormente abstracto, presente en numerosas exposiciones. En esta obra pictórica aprecio su sustancia abstracta, en la que se conjugan, visceralmente, una simbología oscura e impresionista con fuerte presencia del rojo sanguinolento, así como el impulso de duros trazos que caotizan las imágenes y revelan las profundas implicaciones de lo étnico, lo religioso y lo cultural que conviven en sus cuadros”, explicó Acosta.

“Se dice que el Premio es por la obra de la vida, que continúa; no los voy a defraudar”, concluyó Lescay.

En el acto estuvieron presentes Inés María Chapman, viceprimera ministra de la República de Cuba; Alpidio Alonso, ministro de Cultura; Reynaldo Zapata, gobernador de La Habana; Luis Morlote, presidente de la Uneac; Liurba Calzada, miembro del secretariado nacional del sindicato de trabajadores de la cultura; Lesbia Vent, presidenta de la Asociación de Artistas Plásticos de la Uneac, y Miguel Barnet, presidente de honor de la Uneac. Además, participaron directivos y funcionarios del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y del Ministerio de Cultura.

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