Poesía desde el patio

Liannet Gómez Abraham
14/2/2020

Colocan en versos sus más acabados recursos. De ellas y de otros se hacen ecos los trozos escritos. ¡Regalan poesía!

Bajo la tutela de la serie Narciso, la colección Sur presentó los poemarios Contrapeso, de la autora Gisell Lucía Navarro, La gran fuga, de Yenys Laura Prieto, y Los vegueros, de Marta Luisa Hernández, con historias que usualmente no se cuentan.

Presentación de los libros Contrapeso, La gran fuga y Los vegueros, en el Patio de los Jagüeyes
de la fortaleza San Carlos de la Cabaña. Foto: de la autora

 

La presentación —en el Patio de los Jagüeyes, como parte de la 29 Feria Internacional del Libro— sorteó la gentileza entre la poesía intimista y la dedicada a otros.

“Me interesaba sobre todo resaltar esas pulsiones, delirios en zonas de la realidad que no son muy comprendidas. Las obsesiones del mundo desconocido, de la subjetividad mística con la mirada del universo y la existencia de la vida, la muerte y la trascendencia del hombre”, explicó Yenys Laura Prieto, y añadió:

“La gran fuga define más una mirada interior hacia la realidad, pero también el sentido más profundo de la vida, del devenir, del tiempo, del desgaste o de la construcción de otros ambientes que sirven también como punto de salida”.

En un sentido más íntimo dialoga la propuesta Contrapeso, un pequeño poemario que une también las experiencias familiares y personales de su poeta. “El cuaderno es una selección de poemas de varios libros bajo el mismo nombre porque asumo la poesía y la palabra precisamente como el contrapeso para enfrentarme a la vida”, expresó Gisell Lucía Navarro.

Navarro gusta de creer en las coincidencias y encuentra su influencia en autores de otras dimensiones. “En este libro surge un diálogo con mis vivencias, una voz más interior entre la Gisell Lucía que es mujer y joven, que se está encontrando”, concluyó.

En tanto, de Los vegueros, con un sentido más social e histórico, aunque con matices propios nos dice Marta Luisa Hernández: “No empecé a escribirlo de manera premeditada. Parte de experiencias de vida a raíz del paso del tornado que atravesó La Habana el pasado año, junto a elementos históricos de varios de esos lugares. Fue una especie de diario, como un proceso de sanear esas tristes realidades”.

Los vegueros viene a marcar una relación entre la historia y la investigación, un punto de mezcla entre los tiempos del lirismo y la realidad, “el pasado no fue tan feliz y el futuro tampoco lo será”.

Entonces, luego de este recorrido: ¿Por qué la poesía?

Yenis Laura: “La poesía me ha dado, más que un oficio, un espacio desde el cual mirar el mundo, que es lo que más me interesa”.

“Escribir en versos es un espacio de total libertad, que no solo imagino desde la escritura, sino también desde la improvisación, la palabra, el cuerpo, otras dimensiones”, añadió Marta.

“Sencillamente es inevitable en mi vida, porque surge como una necesidad, ya sea en un papel, en el vestuario, pero tiene que estar”, confesó Gisell Lucía.

Y en efecto, la poesía las une.