Otra vez Cien horas con Fidel, y se agradece. Esta vez con algunos añadidos. De nuevo la ocasión de acercarnos a ese padre que no nos ha soltado de la mano porque no queremos desasirnos nunca. Gracias a Ignacio Ramonet y a las editoriales implicadas por traernos esta nueva edición, doce años después de la primera.

El libro, como bien se conoce, recoge el contenido de largas conversaciones entre Ignacio Ramonet y Fidel desde principios de 2003 hasta mediados de 2005. Abarcan una amplísima diversidad de temas, que transitan desde los más personales, hasta los vinculados a la gesta histórica de nuestro país, la situación internacional y las preocupaciones del líder cubano sobre la urgencia de proteger a la especie humana de un sistema suicida. Esta vez, el libro que hojeamos es el resultado de una revisión cuidadosa hecha por el propio Fidel después de la primera edición, con correcciones y precisiones, cotejada incluso, con documentos conservados por la Oficina de Asuntos Históricos del Consejo de Estado, a cargo, entonces, de Pedro Álvarez Tabío.

También se adiciona esta vez el texto “Dos horas más con Fidel”, testimonio de un posterior encuentro del autor con el Comandante, en diciembre de 2013; un capítulo dedicado a los vínculos de Fidel con Francia y su cultura,  no incluido en las versiones cubanas anteriores; y otro emotivo texto a modo de prólogo denominado “Preludio a la cuarta edición. Fidel, la fuerza del espíritu”, nacido de la primera visita de Ignacio Ramonet al monolito que guarda las cenizas del Comandante en el cementerio de Santa Ifigenia. En este “Preludio…” Ramonet reconoce, conmovido, haber percibido su presencia y su fuerza vital. Un texto poético y sincero que nos une en la orfandad sentida por el autor.

Un revelador artículo, “Fidel y la represión de los intelectuales”, publicado a raíz del fallecimiento del Comandante, se suma a la presente edición de Cien horas… En el texto, Ramonet maneja irónicamente el título escogido para denunciar las represalias que sufrió personalmente con motivo de la publicación de su libro con quien tantas veces fue tildado de “dictador” y “represor”.

Con ejemplos concretos, este gran intelectual describe lo que en teoría había abordado ya en otros trabajos acerca del poder que controla los medios: su desaparición de diarios donde hasta entonces escribía regularmente, como El País; La Voz de Galicia; Le Monde. A partir de Cien horas… estos medios, si acaso, lo citaban, era solo para agredirle. En la radio pública “France Culture”, le ocurrió algo similar, mientras que la Universidad París-VII le informaba que no renovaría su contrato. “Esto no ocurrió hace cincuenta años en una lejana dictadura polvorienta. Está pasando ahora, en nuestras ‘democracias mediáticas’”, nos dice el autor.

Es también novedoso, en esta cuarta edición de Ciencias Sociales y la Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado, una cronología de la vida de Fidel y de la Revolución Cubana, ubicada en el contexto internacional, un índice onomástico y una amplia bibliografía, que aportan al lector referencias de inestimable valor.

La presentación del libro de Ignacio Ramonet tuvo esta vez cinco escenarios en distintos puntos de la isla: la ciudad de Camagüey, el día del 145 aniversario de la muerte del Mayor Ignacio Agramonte; la Brigada de la Frontera, en la provincia de Guantánamo; la ciudad de Santiago de Cuba en el cierre de la Feria del Libro; la Ciudad de Santa Clara y finalmente en La Habana, en la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, con la participación de su Presidente, el poeta y narrador Miguel Barnet.

En extremo emotiva fue la presentación realizada en la Brigada de la Frontera, donde los jóvenes soldados y oficiales agradecieron las anécdotas con que el autor evocó las horas irrepetibles junto al Comandante en la realización de la entrevista. Especialmente interesante resultó la intervención del Político de la Brigada, cuando reafirmó a los presentes la certeza acerca de los diferentes escenarios de combate identificados para la Cuba de hoy, que incluyen el combate en las trincheras, pero también, y de manera particular, la guerra cultural y simbólica de la que también somos blanco y que abarca la imposición de gustos y productos culturales vacíos, del apoliticismo y la apatía desmovilizadora. En esta guerra el libro presentado, constituye un arma insustituible.

Todas las presentaciones de esta cuarta edición contaron con palabras introductorias del realizador Luis Morlote, Vicepresidente Primero de la UNEAC, y los comentarios oportunos de Ramonet; y en Guantánamo y Santiago de Cuba, con el lanzamiento del libro Hasta siempre Fidel —compilación de imágenes y textos a cargo de Rosa Miriam Elizalde— sobre los intensos días de duelo y compromiso que vivió nuestro pueblo por la pérdida física de nuestro Comandante, presentado en ambas ocasiones por Abel Prieto, Ministro de Cultura.

El pueblo cubano de toda isla agradece la nueva edición de este libro que sigue las huellas de ese hombre grande, ético y justo, digno y guerrillero, de ese ser extraordinario que fue y es Fidel, como una compañía cierta y necesaria en estos tiempos convulsos de amenazas, guerras y tantas mentiras.