Bayamo celebra el orgullo de ser cubanos

Maité Rizo Cedeño
22/10/2018

Una caballería mambisa volvió a entrar a Bayamo este 17 de octubre. Blancos, negros y mulatos libres llegaron a la primera Plaza denominada de la Revolución en Cuba, y un pueblo enardecido hizo suyas las exclamaciones de ¡Viva Cuba Libre!, ¡Viva el Presidente!

La abanderada de la tropa portaba la insignia que acompañó a Carlos Manuel de Céspedes en el alzamiento del 10 de octubre de 1868 en Demajagua, cuando liberó a sus esclavos e inició la primera guerra anticolonialista, antiesclavista y por la libertad en el país.

Una caballería mambisa volvió a entrar a Bayamo este 17 de octubre. Foto: Armando Ernesto Contreras
 

Los bayameses salieron a recibirlos, como ocurrió en octubre de 1868, pero esta vez un Céspedes inmenso se asomó al balcón de su casa natal, actual Museo, y rememoró la declaración de independencia conocida como Manifiesto del 10 de Octubre.

Esa evocación y la ceremonia de las banderas en la Plaza de la Revolución, donde se izaron la insignia nacional, y la que acompañó el alzamiento del Padre de la Patria, marcaron el comienzo solemne de la XXIV edición de la Fiesta de la Cubanía, en Bayamo, donde se celebra desde el 17 y hasta el 20 del mes en curso, el orgullo de ser cubanos.

La música bravía de las marchas patrióticas interpretadas por la local banda de conciertos, acompañó la colocación de ofrendas florales al Padre de la Patria, y a Pedro (Perucho) Figueredo, autor del Himno Nacional, canción de la cual se cumplió el aniversario 150 de su primera interpretación pública el 20 de octubre.

Junto a las huestes mambisas, escenificadas por el conjunto artístico Guerrilla de Teatreros, llegó al centro histórico la espada ceremonial del primer Presidente de la República en Armas, objeto que encabezará la Fiesta de la Cubanía. La pieza museable recorrió algunas calles de la urbe escoltada por estudiantes de la Escuela Militar Camilo Cienfuegos y una representación de jóvenes en bicicleta, cual mambises de estos tiempos.

La espada del honor, como le llamó Céspedes, fue un regalo que le enviaron en junio de 1869 un grupo de mujeres de Estados Unidos, encabezadas por Emilia Casanova. El Padre de la Patria devolvió de forma inmediata el obsequio, acompañado de una carta que, al decir de los historiadores, constituye un documento programático de la Revolución, y retrata fielmente la estatura moral y revolucionaria del patriota.

Este objeto forma parte de la exposición 1868: Iniciadores y Mártires, que constituye un homenaje a los padres fundadores y muestra objetos pertenecientes a algunos de ellos como Francisco Vicente Aguilera, Pedro Figueredo y el propio Carlos Manuel de Céspedes.

La muestra estará abierta al público en el Museo Casa Natal del Padre de la Patria durante la Fiesta de la Cubanía, evento que concluirá el día de la Cultura Cubana.

El pueblo sede y otras localidades, así como los invitados a la cita, podrán disfrutar de exposiciones de artes plásticas, presentaciones de películas cubanas, encuentros dedicados a la décima, el punto cubano y la rumba, y propuestas de todas las manifestaciones artísticas.

Espacios habituales y de gran aceptación por el público regresan en esta edición, entre ellos la feria de identidad y tradiciones que se organiza en la Plaza del Himno; el Señor de la Música Molida, donde se muestra lo mejor del quehacer de los órganos en la región; el Encuentro Nacional de Bailes de Danzón y las esperadas noches de 100 toneladas de Salsa.

También se presentarán agrupaciones como Buena Fe, el Ballet Clásico de Camagüey, la Compañía Morón Teatro, Eliades Ochoa y el cuarteto Patria; Tony Ávila y su grupo, El Niño y la Verdad, Ópera de la Calle, Rumbatá, el Grupo Moncada, entre otros.

La Fiesta de la Cubanía constituye una oportunidad para disfrutar de lo más auténtico de la nacionalidad cubana, en esta tierra donde comenzaron las luchas por la independencia de Cuba y se cantó por vez primera el Himno Nacional.