Vietnam y Cuba: seis décadas de solidaridad y amistad

Maya Quiroga
7/2/2020

Un espectáculo de danzas tradicionales vietnamitas dio inicio a las actividades de la Feria Internacional del Libro, Cuba 2020, en la Fortaleza San Carlos de la Cabaña.

En la sala Nicolás Guillén tuvo lugar la presentación de la novela Acta de Guerra volumen 1, 2, 3, 4. 75, del periodista Tran Mai Hanh, con la presencia de Víctor Gaute López, miembro del secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba; la señora Truong Thi Mai, miembro del Buró Político, jefa del Departamento de Movilización de Masas del Comité Central del Partido Comunista vietnamita y presidenta de la Asociación de Amistad Vietnam-Cuba; el ministro de Cultura de la República de Cuba, Alpidio Alonso Grau, y Kenelma Carvajal, viceministra de Cultura, entre otros funcionarios.

Portada de la novela Acta de Guerra volumen 1, 2, 3, 4. 75, del periodista Tran Mai Hanh.
Fotos: Ariel Cecilio Lemus

 

El texto fue presentado por Nguyen Quang Thieu, vicepresidente de la Unión de Escritores de Vietnam y director de la editorial Unión de Escritores, quien agradeció la oportunidad de hablar sobre la novela en una sala que lleva el nombre de Nicolás Guillén, el primer poeta cubano cuyas obras fueron traducidas y divulgadas en Vietnam. Mostró además su gratitud por haber tenido el privilegio de estudiar en Cuba hace treinta años.

Del libro resaltó que, en el año 2014, recibió el Premio Nacional de la Unión de Escritores de Vietnam porque en él su autor escribió acerca de la lucha heroica del pueblo vietnamita, con un estilo diferente, al citar documentos confidenciales desclasificados que muestran los problemas internos que existían entre la Casa Blanca y el gobierno títere de Saigón durante los últimos meses del régimen. Eso permitirá a los lectores conocer mejor las causas por las que fueron derrotados en el sur de Vietnam, manifestó.

El director de la editorial Unión de Escritores conminó a los presentes a no olvidar el pasado ni la historia, y dijo que esta fue una guerra por la paz, la independencia y la dignidad de todos los pueblos. Por eso los soldados norteamericanos se dieron cuenta de que las armas más eficientes de los vietnamitas eran su espíritu de lucha y de resistencia, lo que finalmente condujo a la liberación del país.

 

Este libro ofrece un nuevo enfoque sobre la guerra que Vietnam ganó y Estados Unidos perdió, concluyó el señor Nguyen Quang Thieu quien, luego de su presentación, obsequió varios ejemplares del texto a las autoridades cubanas presentes.

A continuación, se desarrolló el panel 60 Aniversario de las relaciones Cuba-Vietnam, moderado por Josué Pérez Rodríguez. La primera intervención fue la de la periodista Marta Rojas, quien fuera la primera mujer de América Latina en trabajar como corresponsal de guerra en Vietnam, un pueblo al que calificó como sumamente culto y heroico.

“Los cubanos somos privilegiados porque pudimos conocer a Vietnam a través de La Edad de Oro, un libro muy significativo para nuestro pueblo, donde José Martí retrata al pueblo vietnamita en el texto ʻUn paseo por la tierra de los anamitasʼ”.

 

En la era atómica ―dijo― los yanquis salieron de Vietnam montados en los patines de los helicópteros. Recordó a Ho Chi Minh, a quien tuvo el placer de conocer personalmente y al que llamó el grande de los héroes vietnamitas. Su figura resume el carácter, el valor y la cultura de su pueblo.

Manifestó que el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro Ruz, sentía gran admiración por el tío Ho y, en un acto político, el Comandante en Jefe expresó que “Por Vietnam los cubanos estamos dispuestos a dar hasta nuestra propia sangre”.

El 2 de diciembre marca una fecha histórica para ambas naciones: ese día, hace 60 años, la República Socialista de Vietnam estableció relaciones diplomáticas con Cuba, el primero de los pueblos de América Latina que apoyó la lucha de los vietnamitas contra el gobierno títere de Saigón. Fidel fue el primer mandatario en visitar las zonas recién liberadas en Vietnam.

Desde hace seis décadas Vietnam y la Mayor de las Antillas mantienen vivos los lazos de hermandad y solidaridad en aras de contribuir al desarrollo sostenible de ambos pueblos.