Desde el arte, jóvenes cubanos recuerdan a Fidel

Thalía Fuentes Puebla
26/11/2019

Este lunes Fidel se vistió de versos, canciones y música, cuando miles de jóvenes se reunieron en la escalinata de la Universidad de La Habana para continuar homenajeándolo, justo en la fecha en que se cumplen tres años de su desaparición física. El 25 de noviembre del 2016 partió a la inmortalidad, pero su obra continúa cabalgando en millones de cubanos, que gritan como anoche “Yo soy Fidel”.

 Jóvenes cubanos se reunieron en la escalinata de la Universidad de La Habana para homenajear a Fidel.
Fotos: Ariel Cecilio Lemus

 

La gala inició con un audiovisual que mostró las esencias en la formación antimperialista del Comandante en Jefe. La actividad contó con la presencia de Miguel Díaz-Canel Bermúdez, presidente de la República de Cuba, y el Comandante de la Revolución y miembro del Buró Político del Partido, Ramiro Valdés, el teólogo Frei Betto, además de personalidades y dirigentes cubanos.

Miguel Díaz-Canel, presidente de la República de Cuba, el Comandante de la Revolución y miembro del Buró Político del Partido, Ramiro Valdés, y el teólogo Frei Betto, entre otras personalidades, estuvieron presentes.
 

“Cuando partiste del mundo, marchabas a la inmortalidad y adquirías otra dimensión. Estás en todas partes, lo mismo en las notas del himno, que suenan más vehementes si pensamos en ti”, aseguró, en nombre de los jóvenes cubanos, Susely Morfa, primera secretaria de la UJC.

Rememoró cómo Fidel fue un soldado ejemplar, el que nos enseñó a desterrar la palabra rendición. “Fidel se ha vuelto presencia y no nos ha abandonado ni un instante, porque nos acompaña en cada batalla, desafío o victoria ante los desmanes del imperialismo”.

Susely Morfa, primera secretaria de la UJC.
 

La ola de juventud ratificaba con fuertes aplausos las palabras de la dirigente, quien también denunció la arremetida de los Estados Unidos contra Cuba y contra el proyecto que construyó Fidel. “Tenemos una Revolución que hemos jurado cuidar, con las armas en la mano, desde la trinchera de las ideas. En Cuba aún nos quedan muchas obras que levantar, pensando como país, juntos y con la guía del Partido, Raúl y Díaz-Canel”.

Después llegaron las artes a adueñarse del escenario. Aser Castañeda, Flavia Mirabal y la Banda Nacional de Conciertos dieron vida al tema El mambí, tema compuesto por Luis Casas Romero. Seguido, el narrador oral e instructor de arte de Guantánamo, Tomás Pantoja, declamó el poema Escribo Fidel de la autoría de Jesús Cos Cause.

Las décimas del repentista Antonio La Villa, instructor de arte de la provincia de Villa Clara, y el poema Yo soy Fidel, de la capitana Rosemarys Quesada, recordaron el compromiso que significa seguir su ejemplo imperecedero.

Vocal Sampling y una niña de La Colmenita cantaron El elegido.
 

Vocal Sampling y una niña de La Colmenita cantaron El elegido; después esta agrupación de música a capella interpretó el icónico tema Girón, el preludio. Luis Franco, joven trovador de la Asociación Hermanos Saíz, recordó la canción de Silvio Rodríguez, Por quien merece amor, porque amor de todo un pueblo fue algo que el Comandante se ganó a pulso.

Luis Franco, joven trovador, interpretó Por quien merece amor de Silvio Rodríguez.
 

Las raíces afrocubanas dijeron presente con el Conjunto Folclórico Nacional, e inmediatamente, todos encendieron sus móviles y la escalinata se iluminó al compás del grupo Moncada con Mi historia crecerá y Saberse cubano, tema de Kiki Corona, en la voz de Kiko Ruiz y Vocal Renacer.

Conjunto Folclórico Nacional.
 

Durante la velada se presentaron también materiales que reúnen anécdotas de la explosión del barco La Coubre, la Crisis de Octubre, el atentado a la aeronave de Cubana de Aviación en Barbados, un discurso pronunciado por el Comandante en Jefe en las Naciones Unidas, el reclamo de Elián, la presencia de Fidel en las tribunas abiertas, el regreso de los Cinco Héroes y la lucha contra el bloqueo.

La escalinata se iluminó al compás del grupo Moncada.
 

Fidel se merece ese y todos los homenajes del mundo. Dos horas no son suficientes para recordarlo. Lo que sí demostró los “Yo soy Fidel” de la pasada noche es que su ejemplo se multiplica y crece entre todos los que sueñan un país mejor.