Figuraciones
7/7/2016
Cuando uno escucha un disco después de varios años de haber sido editado y lo disfruta como si fuera nuevo, no cabe otra cosa que concluir que estamos ante un verdadero producto cultural y no frente a una de esas tantísimas grabaciones que solo responden a modas coyunturales y a una simple operación de mercadeo. Justo lo anterior me ocurre con Figuraciones (Bis Music), que fue el primer esfuerzo discográfico acometido por el pianista y compositor Ernán López-Nussa cuando decidió iniciar una carrera como solista, tras su fructífera experiencia como integrante de los grupos Afrocuba y Cuarto Espacio, sin duda alguna dos de las agrupaciones que han dejado un mayor legado en la escena de la Música Cubana Alternativa.
Las intenciones de Ernán y de sus compañeros de aventura se ponen a las claras de manifiesto desde el primer corte del álbum, ese estándar del jazz de todos los tiempos que responde al nombre de “On green dolphin street”. La versión que aquí se nos ofrece parte de fusionar los aires clásicos del género con la ritmática cubana, para así entregarnos una propuesta dentro de los códigos del jazz latino, objetivo que va a ser la columna vertebral del CD. En este corte, López-Nussa da espacio para que el contrabajista Carlos del Puerto (hijo) y el baterista Jimmy Branly (antiguo colega del pianista en las filas de Cuarto Espacio) demostraran que están entre los mejores intérpretes surgidos durante los 90 en nuestro país en los terrenos del jazz.
Sigue luego una composición de Ernán que se ha convertido en una de las piezas que lo identifica. Me refiero a “Momo”, que para la presente ocasión es interpretada a piano solo. A fuerza de ser sincero tengo que decir que, en mi caso personal, prefiero la anterior versión que se conoció del tema a cargo de Cuarto Espacio. Esta que nos brinda su autor no está nada mal, pero se me queda por debajo de la otra en el sentido de búsqueda de nuevas articulaciones y en especial de tímbricas no habituales dentro de la música cubana. A favor del actual arreglo de “Momo” cabría comentar que permite valorar de forma mucho más nítida lo interesante del trabajo del creador al traer a nuestro tiempo un género local de finales del siglo XIX como es la contradanza.
Entre mis cortes favoritos del fonograma incluyo “You are the sunshine of my life”, una vieja canción del estadounidense Stevie Gonder, perteneciente a la que estimo como su etapa dorada. Aquí López-Nussa vuelve a recurrir al formato de trío, es decir, piano, contrabajo y batería. Lo interesante del arreglo viene dado por el sutil modo en que se inserta la síncopa en una estructura morfológica que en esencia es fiel a la propuesta inicial de Gonder. El primer solo de la pieza corre por Carlos del Puerto y me resulta en extremo tierno. En el caso del que desarrolla Ernán, el mismo sobresale por su fluidez. En los distintos coros que lleva adelante, siempre desde la mesura, va tejiendo un discurso que poco a poco complejiza, en el que junto a la sucesión de notas ya hacia los finales también echa mano al ponche de acordes. Sencillamente excelente.
Viene después una trepidante versión de “Giant steps”, esa maravillosa composición del saxofonista John Coltrane. El énfasis del arreglo recae esta vez en lo ritmático. A lo largo de todo el corte se percibe a las claras la influencia en la estructura formal del género bailable. Algo por el estilo sucede con “La negra Tomasa”, original de Rodríguez Fife. Sé que en un disco de jazz latino inevitablemente hay que incluir piezas de este tipo, que a las mayorías consumidoras del género les encantan y son caballos de batalla en cualquier concierto. Sin embargo, por el uso y abuso que se ha realizado de este tipo de propuestas, me van resultando demasiado manidas. Pero qué le vamos a hacer, son las reglas del mercado y además de arte, la música es un producto comercial que hay que vender.
Para mi gusto, la cosa vuelve a ponerse buena en el tema que da nombre a la grabación, “Figuraciones”. Para que se comprenda exactamente lo que quiero decir, esta es una composición también dentro de los cánones del jazz latino, pues está inspirada en la rumba de cajón y el guaguancó; no obstante, el trabajo pianístico —en el que brilla la mano izquierda— resulta harto llamativo y no cae en los clichés tan empleados por los días que corren y que para mí ya son demasiado aburridos. En el corte, además, se destaca la intervención de Inor Sotolongo, uno de los percusionistas más estables surgidos en nuestro país en los últimos tiempos.
Otra de las creaciones de Ernán, recuperada por él de los gloriosos tiempos de Cuarto Espacio, es esa joyita denominada “Polkandson”. Para la interpretación de la pieza, se nos presenta íntegro el cuarteto que para los días de la grabación de este álbum lo acompañaba. La melodía representa a la perfección el carácter transnacional por el que hoy atraviesa lo más avanzado de nuestro quehacer sonoro y en particular el conjunto de lo que he dado en llamar Música Cubana Alternativa. No me oculto para afirmar que creaciones como esta son las que más me cautivan y creo que en cosas así es donde nos encontramos con el mejor López-Nussa. Como su propio nombre lo indica, el tema representa una simbiosis en la cual se fusionan en absoluta armonía dos géneros típicos de latitudes bien remotas del planeta: polka-and-son. Resulta también el único corte de la grabación en el que se introduce, junto al piano, la tímbrica de los teclados electrónicos. El solo de Ernán es muy caliente y funciona como estupendo preámbulo para que tanto el percusionista Inor Sotolongo, como el batería Jimmy Branly, se luzcan en sus respectivos instrumentos.
Como inequívoca señal de que no quiere ser encasillado en tal o más cual estilo, acertadamente Ernán escoge para concluir su CD Figuraciones una pieza de ese revolucionario de la música contemporánea que fuera el trompetista Miles Davis, el tema titulado “Solar”. Sobre la aparición de dicha composición en un disco que en lo fundamental está orientado hacia los perfiles del jazz latino, el propio López-Nussa comenta en el libreto-portada del material: “Este tema está incluido a modo de recreación del mundo de los Standars de jazz en su clásica tradición. Es quizá mi homenaje a este gran género que evoluciona y cambia, pero continúa siendo una constante en nuestra vida como músicos de jazz”. A tono con lo antes expuesto, aquí el juego es al duro y el trío conformado por Ernán, Carlitos y Jimmy se explaya a sus anchas para que no le quede duda a nadie de que ellos saben lo que se traen entre manos.
Han pasado los años desde que Figuraciones viese la luz como fonograma. Hoy, los músicos involucrados en esta grabación llevan adelante otros proyectos en distintas latitudes. Empero, lo importante está dado por el hecho de que por suerte su propuesta sonora quedó registrada en soporte digital. Es un trabajo que da testimonio de los derroteros por los que transitase la música cubana de carácter propositivo, y en particular el jazz, durante la pasada década de los 90.