En la tarde del 22 de abril tuvo lugar el primero de los encuentros de teatro que sostendrá la Casa Editorial Tablas-Alarcos en el marco de la XXX Feria Internacional del Libro de La Habana. El encuentro con lectores y teatristas se sostuvo en la Sala Llauradó de la Casona de Línea, espacio que se convierte cada año en subsede de la Feria y lugar elegido por la casa editora para presentar sus novedades editoriales al público.

Osvaldo Cano, Yudd Favier e Isabel Cristina Hamze han acompañado el quehacer de Tablas desde sus primeras etapas como críticos, además de mantener otros perfiles como teatrólogos y docentes. Foto: Fefi Quintana

Un panel dedicado a los 40 años de la revista Tablas inauguró la tarde. El mismo es parte de una serie de encuentros que a lo largo de este año tendrá la editora especializada en teatro con colaboradores de la revista fundada en 1982 por la Dirección de Teatro y Danza del Ministerio de Cultura. El primero de estos paneles tuvo lugar en enero de este año en esta misma sala teatral. Reunió a varios de los directores históricos de la revista, y se centró en las diferentes etapas de trabajo que han marcado la entrega en 40 años. En tanto, la tarde del 22 de abril estuvo reservada para el diálogo con los teatrólogos Osvaldo Cano, Yudd Favier e Isabel Cristina Hamze, profesionales de teatro que han acompañado el quehacer de Tablas desde sus etapas primerísimas como críticos, además de mantener otros perfiles como teatrólogos y docentes.

Osvaldo Cano, reconocido especialista y profesor de Historia del Teatro Cubano quien fungiera como Decano de la Facultad de Arte Teatral de la Universidad de las Artes (ISA), abordó la relación histórica entre la publicación y la academia. Según apuntó, desde los inicios de la revista, cuando él mismo era un joven estudiante de teatrología, profesores de la Facultad de Arte Teatral como Rosa Ileana Boudet, Rine Leal, Magaly Muguercia, Francisco López Sacha o Graziella Pogolotti eran los principales promotores y colaboradores de la misma. Defendieron el proyecto de la publicación al reconocer en ella la voz que articulara verdaderamente el teatro nacional. A pesar de que otros órganos como Juventud Rebelde, La Gaceta o Bohemia dedicaran algunas de sus páginas al teatro, concordaban en que este acercamiento al teatro debía ser hecho por especialistas del arte de las tablas. Apuntó: “Muchos de nuestros profesores en el ISA sembraron en nosotros la necesidad de escribir en Tablas. Aunque en un inicio no era una revista abierta a jóvenes críticos y estudiantes como lo es hoy; ellos, desde entonces, nos enseñaron la importancia de que ese espacio fuera mantenido por los especialistas y las personas que investigábamos el teatro. Por supuesto, una relación tal con los jóvenes críticos siempre tuvo, y tiene aún, un saldo positivo”.

Los panelistas reconocieron que Tablas está a las puertas de grandes cambios dictados por la celeridad de la vida moderna y el acceso vertiginoso a la información.

Por su parte, la teatróloga Yudd Favier, cuyo trabajo como asesora reconocemos en grupos como el matancero Teatro de las Estaciones, reflexionó sobre la importancia que tiene la entrega, como el espacio que acoge a los jóvenes estudiantes y críticos: “Tablas tiene que mantener ese estatus entre los estudiantes de teatro de ser ese escalón difícil de alcanzar, una validación dentro del mundo del teatro… el lugar al que debe aspirar cualquier estudiante durante su carrera como crítico teatral. Desde siempre ha sido un gran logro que como estudiante un profesor eligiera una crítica tuya para ser publicada en Tablas. También debemos reconocer el valor documental de esta revista. En muchos años, cuando analicemos lo que estamos haciendo ahora en materia de teatro, vamos a leer Tablas y seremos capaces no solo de reconocer el teatro que hacemos, sino la manera de pensar el hecho escénico. Por eso es importante que se mantenga como una revista de pensamiento”.

La escritora, teatróloga y docente Isabel Cristina Hamzerealzó el trabajo de acompañamiento de eventos nacionales e internacionales que ha sostenido siempre la revista: “No hablo solo del Festival de Teatro de La Habana o el Festival de Camagüey, que tanta importancia tienen para los teatristas; me refiero también a pequeños festivales, talleres, encuentros a donde Tablas siempre ha enviado a un especialista con la única misión de cubrir el evento. Esto hace que Tablas no sea una revista “habanacentrista” en muchos aspectos, pues a lo largo de los años ha sido capaz de proveer a todos los espacios nacionales que le ha sido posible de un lugar protagónico, ese espacio de validación que sigue siendo para los teatristas que su obra aparezca reflejada en la revista”.

Los panelistas coincidieron en que la revista está a las puertas de grandes cambios dictados por la celeridad de la vida moderna y el acceso vertiginoso a la información, que demandan de la casa editorial una puesta en marcha de otros mecanismos para captar lectores y para seguir siendo espejo del quehacer teatral cubano. Abogaron por el rescate de antiguas secciones teóricas entre sus páginas y por la agilización de sus procesos editoriales para que cada entrega se parezca lo más posible al período teatral que se vive.

Isabel Cristina ha descrito esta obra como un libro de viaje dictado por el teatro, pero que no aborda el teatro en sí mismo, sino su esencia más humana. Foto: Doris Ramos

La tarde del 22 de abril fue la fecha escogida a su vez para la presentación al público del número 3-4/2021 correspondiente a la entrega extraordinaria de la revista Tablas por sus 40 años. Este número reúne los textos de varios de los colaboradores y hacedores de la revista a lo largo de estas décadas, quienes llegaron a sus páginas como jóvenes estudiantes de periodismo o crítica teatral y encontraron en ella su “escuela y fragua” —para usar palabras del crítico Roberto Gacio—. Figuran también en estas páginas las experiencias de Liliam Vázquez, Eberto García Abreu, Ismael Albelo, Osvaldo Cano, Habey Echavarría, Frank Padrón, Yohayna Hernández, Rosa Ileana Boudet y Omar Valiño; cuyos textos, a lo largo de los años, conforman junto al de otros escritores el cuerpo crítico e investigativo de la revista.

Fueron proyectados sendos mensajes de felicitaciones de Rosa Ileana Boudet, fundadora de la revista en 1982 y de Yohayna Hernández, jefa de redacción de Tablas hasta 2018.

Fue también presentado al público asistente el Catálogo Institucional Tablas-Alarcos en su versión para PC y Android, que recoge todo el trabajo editorial hasta el momento. Este catálogo cuenta con la programación de Mónica Marcial sobre los diseños de arte de la artista gráfica Daniela Portilla, responsable de la imagen de la campaña por los 20 años de la editorial. Se trata de una herramienta para consultar todos los productos de la casa editorial: desde la revista, las diferentes colecciones, el boletín de crítica escénica El Comején, los Premios Tablas, los boletines informativos El Tándem, las campañas gráficas, entre otros. Fue pensado como una herramienta de consulta para estudiantes y académicos, puesto que organiza de una manera coherente todas las entregas y facilita el acceso a información.

Por último, fue también presentado el libro A Baracoa me voy… una cruzada teatral, de Isabel Cristina y el artista audiovisual Jorge Ricardo con la colaboración de la Oficina regional Rosa Luxemburgo de México. Este libro fue descrito por su autora como un “libro de viaje, dictado por el teatro pero que no aborda el teatro en sí mismo sino su esencia más humana, que un arte como el teatro es capaz de prodigarnos en un entorno como el que se vive durante las cruzadas teatrales”.

1