Aunque el festival Un puente hacia La Habana siempre ha ponderado la música alternativa, las “músicas del mundo”, el éxito en sus 10 ediciones anteriores ha permitido que el evento se consolide en los circuitos internacionales y se convierta en un embajador de la cultura cubana.

A pesar de estos logros, no se ha quedado detenido en el tiempo y ha ampliado su abanico de géneros y estilos musicales. Con su enfoque en el intercambio cultural y la promoción de la diversidad, esta cita liderada por Jorge Luis Robaina, Jorgito Karamba, continúa siendo un punto de encuentro para artistas y amantes del arte de todo el mundo.

El festival se ha consolidado en los circuitos internacionales y constituye un embajador de la cultura cubana.

La oncena edición del evento se llevará a cabo los días 23, 24 y 25 de junio en el Club 500 de La Habana. Como en años anteriores —declaró Jorgito Karamba en conferencia de prensa este martes— Un puente hacia La Habana busca ofrecer una experiencia única para los artistas y el público, con un ajiaco de géneros que incluye la música popular bailable, el urbano y los ritmos alternativos.

“Siempre nos inclinaremos a trabajar la música alternativa, la música mestiza, la música cubana; pero en esta oportunidad hemos querido abrir y fortalecer ese nicho de artistas que hoy están apostando y fortaleciendo el mercado interno de la música cubana”, comentó.

Con su enfoque en el intercambio cultural y la promoción de la diversidad, el festival Un puente hacia La Habana continúa siendo un punto de encuentro para artistas y amantes del arte de todo el mundo.

Para la primera noche del festival, se presentarán Haila, Will Campa, Toques del Río y un artista de género urbano muy bien posicionado procedente de España, cuyo nombre, como el resto de los invitados internacionales, será divulgado días antes de la presentación. La segunda noche tendrá una onda más cercana al pop y la música alternativa con artistas demandados entre el público joven como Jotabarrioz, Karamba, Buena Fe, el Dúo Iris y una agrupación española que defiende este tipo de género.

La noche final estará enfocada en la música popular bailable, con Issac Delgado, Maykel Blanco y su Salsa Mayor, Alex Duvall y un artista del género urbano de Puerto Rico que actualmente radica en los Estados Unidos. La entrada al Club 500 —por un monto de 250 pesos cubanos— será a partir de las siete de la noche y los conciertos comenzarán desde las nueve hasta las dos de la mañana.

Este evento busca ofrecer una experiencia única para los artistas y el público, con un ajiaco de géneros que incluye la música popular bailable, el urbano y los ritmos alternativos.

El festival contará con la presencia de djs y bailarines, así como con la cobertura técnica de P.M.M. Records para garantizar la calidad del evento. Las entradas estarán disponibles en diferentes lugares de la capital cubana, así como en la plataforma digital Ticket.

Un puente hacia La Habana es organizado por la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (Egrem), y su Agencia de Representación de Artistas, Musicuba, que desplegarán el evento en coproducción con un nuevo gestor de la economía, 360 Producciones SRL, además del apoyo del Gobierno de La Habana y el Distrito Cultural Plaza.

1