Eusebio Leal en la memoria agradecida de Holguín

Erian Peña Pupo
4/8/2020

“Eusebio Leal proyectaba luz no solo para La Habana, sino para todo el país”, comentó Hiram Pérez Concepción, presidente de la Unión Nacional de Historiadores de Cuba en Holguín, durante el homenaje que se realizó en el Museo Casa Natal de Calixto García al reconocido intelectual e historiador de La Habana, fallecido el pasado 31 de julio.

Como tributo a quien mantuvo gran parte del patrimonio cultural e histórico de la nación bajo su salvaguarda, se organizó un panel integrado por los historiadores Ángela Peña Obregón, el propio Hiram, y José Abreu Cardet (Premio Nacional de Historia), quienes abordaron el legado de Eusebio y los vínculos con la provincia.

El prestigioso panel evocó la obra de Eusebio Leal y su relación con la provincia de Holguín. Fotos: Del autor
 

Peña Obregón destacó el trabajo de restauración de Eusebio en la década del 70, cuando lo conoció, y cómo su impronta, no solo en la capital, ha permitido preservar otras ciudades de la isla.

Por su parte, Pérez Concepción realizó una cronología de las principales estancias en Holguín del autor de libros como Regresar en el tiempo, Carlos Manuel de Céspedes. El diario perdido, La luz sobre el espejo y Detén el paso, caminante. Entre los momentos importantes destacó la visita a la Casa Natal en la década del 70, con motivo de la inauguración de una muestra expositiva de piezas relacionadas con Calixto García, instante en que recibió el Hacha de Holguín. Regresaría en 1992 para las actividades por el quinto centenario del encuentro —o encontronazo— entre las dos culturas, donde impartió una conferencia en el hotel Pernik, sede del evento teórico. Le fue entregado entonces el Aldabón de La Periquera.

Poco después, en 1997, inauguró una exposición de Cosme Proenza en las Romerías de Mayo; realizó la conferencia inaugural del evento Memoria Nuestra, y recorrió la ciudad de Gibara, por cuyo rescate se preocupó desde la Oficina del Historiador. Estuvo en Holguín nuevamente en 2013, invitado por la Casa de Iberoamérica, institución que le entregó en 2018 su distinción homónima, y donde realizó, en el Congreso Iberoamericano de Pensamiento, una conferencia sobre las experiencias de restauración desde la Oficina. Retornaría en la delegación que acompañó la visita del Papa Francisco.

Por su parte, José Abreu Cardet resaltó la sensibilidad de Leal “ante todos los públicos, lo que conllevó que además de historiador, fuera un promotor como pocos de la historia. Eusebio unía la emoción con el análisis. Priorizó la publicación de textos para especialistas, necesarias para el análisis historiográfico, pero llevó la historia a los sectores más populares con un lenguaje directo, desde el programa Andar La Habana y otros escenarios donde su palabra llegaba. Eso hizo que todo el pueblo lo llore y lo lleve también en el corazón como un amigo cercano”.

El homenaje —que contó con la presencia de las principales autoridades de la provincia— sirvió para que los artistas, historiadores, intelectuales, las instituciones y el pueblo rememoraran facetas de Leal como investigador, intelectual y amigo, y firmaran el libro de condolencias. Además, el poeta Ronel González dedicó unos versos a su memoria bajo el título “Desandar la luz”.

En esta provincia, como en el resto del país, Eusebio compartió su savia y su verbo encendido, y se preocupó por ser escuchado, sobre todo, por las más jóvenes generaciones. Nacido el 11 de septiembre de 1942 — y además diputado a la Asamblea Nacional de Cuba, presidente de Honor de la Unión Nacional de Historiadores de Cuba y miembro de número de la Academia Cubana de la Lengua—, sembró la tradición de la virtud, el respeto a la historia y la fe en la patria.

La Casa Natal de Calixto García fue sede del tributo realizado a Eusebio Leal.
 
Los asistentes firman el libro de condolencias.
 
Tuvo lugar un emotivo espacio cultural durante el homenaje al historiador.