Isla y poesía. Tópicos de la insularidad en la poesía de Luis Yuseff

Rubén Ricardo Infante
31/3/2020

La insularidad es un fenómeno que distingue la identidad del cubano. La condición de ser tierra rodeada de agua por todas partes configura en los seres que habitamos la isla un sentimiento que es, al mismo tiempo, complaciente y de enfrentamiento. Nuestra isla comienza su historia por la poesía, decía Lezama; sin embargo, para Virgilio Piñera la insularidad era: “La maldita circunstancia del agua por todas partes”. Quizás sean estas las expresiones que marcan dos posiciones que, lejos de retarse una a otra, logran complementarse para ofrecer una diversidad de criterios sobre el reflejo de la condición insular.

El análisis referido a los años 2000-2010, primera década del siglo XXI, nos permite hacernos una idea suficientemente precisa acerca del proceso de continuidad y ruptura en la tradición literaria, específicamente poética, de la Isla; dentro de ese proceso se inicia el quehacer literario de Luis Yuseff Reyes (Holguín, 1975).

Golpear las ventanas. Fotos: Del autor
 

La insularidad es una característica que se desprende de la condición de vivir en una isla. Su génesis parte de lo geográfico, pero ocupa posiciones de tipo simbólica, cultural y en el imaginario de quienes habitan estos territorios. Una isla es una porción de tierra menor que un continente, toda rodeada de agua, son territorios cuyas fronteras son casi únicamente marinas. Ello supone una diferencia notable en relación con los continentes, donde por lo general el paso de un país a otro puede realizarse por distintas vías. Sin embargo, en las islas la entrada desde el exterior solo puede efectuarse a través del propio mar, o por vía aérea. 

En años recientes la publicación de la antología La isla en versos. Cien poetas cubanos (Eds. La Luz, 2011), compilación del propio Yuseff junto a Yannier H. Palao, volumen que agrupó a poetas cubanos nacidos después de 1970 y que en sus poemas abordan el tema de la insularidad, es un ejemplo de cómo el tema se ha manejado por los jóvenes autores.

La lectura detenida de este volumen permite comprobar como hipótesis que un amplio número de poetas jóvenes cubanos tratan en sus textos el tema de la insularidad a través de tópicos como: el mar, la naturaleza, la vida político-social y la emigración. Ellos servirán de guía para trazar el estudio de la creación poética en esta década, pues es comprobable la amplitud de temas presentes en la obra de estos autores, entre los cuales sobresale el de la insularidad.

La rosa en su jaula.
 

La isla es un espacio concluyente donde cada nuevo poema se incorpora con la duda de formar parte de una dimensión mayor, casi de carácter inabarcable. Si la isla era patria sonora de los frutos para Gastón Baquero, fiesta innombrable para Lezama, para Virgilio Piñera significaba presencia y denuncia, espacio de opresión para quienes la habitamos.

La referencia al tema de la isla en el concierto de la poesía cubana del siglo XX —donde prima una amplitud formal y estética—, no es una noción exclusiva presente en la creación poética del primer decenio del siglo XXI. Lo insular está contenido en una parte considerable de la obra de los poetas de Cuba; en el siglo XX se mantiene este tema y en la primera década del siglo XXI transita por otros dominios.

En el caso de Yuseff inició su labor literaria con la publicación del cuaderno El traidor a las palomas (Eds. Holguín, 2002), pero es con la obtención del Premio de la Ciudad de Holguín en el género poesía que gana una verdadera afirmación de presencia en la poesía holguinera y cubana en general. El título Vals de los cuerpos cortados (Eds. Holguín, 2004) es el que inicia el reconocimiento a su obra como poeta y lo sitúa como uno de los representantes más consagrados de su generación y, específicamente, de esta promoción.

Vals de los cuerpos.
 

Con una carrera ascendente y un currículum que incluye la obtención de los principales premios literarios convocados en Cuba, su poesía ha sido valorada por importantes figuras del quehacer literario en la Isla. Su obra ha sido incluida en diversas antologías realizadas dentro y fuera de Cuba con el objetivo de mostrar una zona de la poesía cubana más contemporánea. Por solo mencionar tres recientes hay que referir: La isla en versos. Cien poetas cubanos,La isla de los peces blancos. Antología Veinte Aniversario del Premio Calendario de Poesía (Ediciones La Luz, 2016) y en Madrid: Lenguas de marabú. Poesía cubana del siglo XXI.

En el año 2009, el poeta, editor y ensayista holguinero Manuel García Verdecia señalaba: “Es inusual que un poeta tan joven haya ya alcanzado no solo temas de conmovedora madurez existencial, sino modos de una delicada, aceptada serenidad” (García, 2009: 15).

En un volumen como La isla en versos…, dedicado a mostrar las maneras en que los jóvenes representantes asumen el sentido de la insularidad, se aprecia cierta afiliación a los planteamientos de Virgilio Piñera expuestos en La isla en peso (1943). Los poemas incluidos delatan múltiples referencias a este poemario, el cual no deja de ser una propuesta tentadora con la que se establece el grado de cercanía debido al universo o cosmovisión insular que patentó Virgilio.

En otros casos se remite a hechos de carácter mitológico como el viaje de Odiseo; la isla como espacio para los amantes; la necesidad de traspasar esas fronteras que el mar impone, de emprender un viaje hacia cualquier sitio; la ciudad en el entramado urbano y su significación como lugar vital. Estas son algunas de las maneras en que los jóvenes poetas asumen el discurso insular, y a medida que su propia obra nos devele el misterio, encontraremos otras características, las que pertenecen a una herencia poética nacional.

El viaje de Odiseo se convierte en motivación para textos como el de Luis Yuseff, “La otra isla”, donde le advierte a Ulises los peligros de su viaje:

No es Ítaca quien desaparece

Ulises.

La espera es implacable.

No debiste partir.

Aunque no es un referente propio del poema, queda de trasfondo la idea del exilio, del alejamiento de la realidad insular. Y el poeta se refiere al posible regreso: “No te sorprendas / Ulises / si a tu regreso descubres que / Penélope / se ha convertido en tu nueva Ítaca” (2002: 24). El poema, incluido en El traidor a las palomas (2002), se conecta con otros textos del autor pertenecientes a volúmenes posteriores.

Lo insular marca una línea transversal a lo largo del discurso lírico de Yuseff. EnVals de los cuerpos cortados, aparece un poema que será antologado por el propio escritor como referente en el tema, “Fuga de isla”:

Viajamos en coche de segunda clase. Isla

con sus casitas de madera

dormidas junto al camino

techos de zinc bajo la luna de yagua.

Amar tu raíz isla

bebiéndote el agua de mañana. (2004: 15)

Este es un texto que se enlaza con la tradición poética de la Isla, donde los espacios no citadinos ocupan una zona de la poesía escrita en los diversos escenarios de Cuba. Sobre la partida, el viaje y el regreso del emigrado, trata “Souvenir”, desde el propio título se intuye este sentido:

Goteando sobre la isla. Cayendo en la trampa espiral

del regreso.

Con el souvenir entre las manos

el que vuelve no sabe ya cuándo se parte de nuevo cómo. (2004: 18)

Los fragmentos de los textos seleccionados refieren la existencia de un discurso insular en la poesía de este autor; al revisar el resto de los cuadernos, se aprecia una línea continua sobre esta temática. Lo insular no solo se denota a través de los tópicos referidos, sino en el sentido de cercanía con el espacio “Isla”, el reconocimiento del creador con el ambiente circundante y en las interrelaciones que se establecen desde el medio social y cultural.

Nota:

Luis Yuseff formó parte de diez jóvenes poetas seleccionados para un estudio de los “Antecedentes poéticos y desarrollo de los tópicos de la insularidad en la joven poesía cubana. Diez visiones de la isla (2000-2010)”, presentado como Tesis de Maestría en el programa de Historia y Cultura en Cuba, que convocó el Centro de Estudios de Cultura e Identidad (CECI) de la Universidad de Holguín, bajo la tutoría del Dr. C. Virgilio López Lemus, a quien extiendo mi agradecimiento infinito. La presentación de los resultados de esta investigación se realizó el 12 de marzo de 2019 en la sede de Ediciones La Luz en la ciudad de Holguín.

Bibliografía:

  1. García Verdecia, M. (2009): “El eterno sol  que nos concierta y encauza”. Prólogo a El sol eterno. Antología. Jóvenes poetas holguineros. Holguín, Cuba: La Luz.
  2. Yuseff, L. (2002): El traidor a las palomas. Holguín, Cuba: Holguín.
  3. Yuseff, L. (2004): Golpear las ventanas. La Habana: Letras Cubanas.
  4. Yuseff, L. (2004): Vals de los cuerpos cortados. Holguín, Cuba: Holguín.
  5. Yuseff, L. (2007): Salón de última espera. La Habana: Casa Editora Abril.
  6. Yuseff, L. (2009): Los silencios profundos. Holguín, Cuba: Holguín.
  7. Yuseff, L. (2010): La rosa en su jaula. Santiago de Cuba, Cuba: Oriente.
  8. Yuseff, L. (2010): Los frutos de Taormina. Matanzas, Cuba: Matanzas.
  9. Yuseff, L. y Yannier H. Palao (comp.) (2011): La isla en peso. Cien poetas cubanos. Holguín, Cuba: La Luz.