Mentira
No es verdad que te hayas muerto,
estás en la educación,
tú eres la Revolución
hasta en el mismo desierto.
Eres del futuro el puerto,
tú eres por esa virtud
de Mesías, un alud
de humanitario torrente
cuando a cada continente
vas repartiendo salud.
Tú estás presente en la ciencia,
la agricultura, el deporte,
tú eres el mayor soporte
que tiene la independencia.
Al mundo tu transparencia
das con tu verbo profundo,
de tristezas no me inundo,
tú estás en cada contraste
del mundo, y que te marchaste
no lo va a creer el mundo.
¡Qué mentira colosal
decirte muerto Fidel!
los hombres de tu nivel
no conocen el final.
Tú eres de estirpe inmortal
y eso no va a revertirse,
tu ideal verás fundirse
en cada nueva batalla
pues los hombres de tu talla
nacen para no morirse.
Tú estás en la juventud,
en el amor y el cariño,
tú vives en cada niño
igual que en la senectud.
Tú marchas a plenitud
por la ruta de la gloria,
por tu ejemplar trayectoria
el mundo te prohijó:
ya la historia te absolvió,
tú estás viviendo en la historia.
Omar Mirabal (Mayabeque)
El retorno
Regresa la caravana
con un crecido Fidel
multiplicado en la piel
de la tranquila mañana.
Llora el pueblo de La Habana
le dan vivas a su paso
y se nos queda el abrazo
pendiente, todo se inflama
el aire guarda la llama
y este simbólico trazo
surca la isla otra vez,
buscando unir a los tres
gigantes de la montaña.
El día es largo, se engaña
todo el que busca en la tez
indiferencia o castigo,
solo el amor va contigo
el pueblo vino a encontrarte
y te ha dejado una parte
de su alma como abrigo.
Vives Fidel, vas ahora
con otros pulsos latiendo,
tu palabra va in crescendo
mientras recorres la aurora.
Para ti nunca hay demora,
nunca te alcanza lo oscuro;
ahí vas Caballo futuro
presente sol de los pobres,
desde los campos salobres
a las montañas del puro
arroyo que amó Martí.
Vamos contigo, no hay nada
que impida nuestra avanzada,
que nos separe de ti.
El tiempo sabe que sí
y te propone su noria
de partida y desmemoria
pero nosotros, amigo,
vamos entrando contigo
por las calles de la gloria.
Karel Leyva Ferrer (Santiago de Cuba)
Comandante
Comandante el recorrido
de su vida por la historia
seguirá en la trayectoria
de las filas del partido.
El pueblo seguirá unido
a nuestra Revolución,
y en esa sólida unión
usted siempre estará al frente
ejemplo de combatiente
y guía de la nación.
Comandante su ideal
siempre estará a nuestro lado
porque usted nos ha enseñado
cómo combatir el mal.
Usted se ha vuelto inmortal
en su hermosa trayectoria,
y la historia de su gloria
hace que vivo se quede
porque la muerte no puede
con el peso de su historia.
Armando López Rondón (Ciego de Ávila)
Fidel
Fidel no pudo el imperio
más poderoso y feroz
crucificarte en la voz
el poder de tu criterio.
La luz de tu magisterio
a los hombres ilumina,
tu historia aquí no termina,
pues tu espíritu lo expandes
y elevas sobre los Andes
por la América Latina.
Sabe todo el que te ha visto
o ha escuchado hablar de ti
que eres igual que Martí
que Dios o que Jesucristo.
La sierra te vio provisto
de estrategias de valor
sin pensar en tu dolor,
porque cambiaste la vida
de una nación oprimida
por un futuro mejor.
Pusiste en cada cubano
la dosis de independencia
que a gotas de transparencia
resbalaba por tu mano.
Ningún norteamericano
podrá opacar tu memoria,
será que es tanta tu gloria
donde mi patria te sabe
que toda junta no cabe
en el libro de la historia.
Fidel, ni siquiera un día
pasará sin que haya un hombre
que no se apoye en tu nombre
para hablar de valentía.
Tú eres el faro y la guía
de todos los proletarios,
y habrá nuevos voluntarios
con tus mismas convicciones
sembrando en los corazones
sueños revolucionarios.
José Enrique Paz (Mayabeque)