“La muerte no es verdad cuando se ha cumplido bien la obra de la vida”. Otra vez Martí, para definir el quehacer de la diseñadora Nieves Laferté, quien el pasado 5 de agosto hubiera cumplido 80 años de vida.
La trayectoria de la artista como diseñadora escenográfica y de vestuario en el teatro y el cine, a la par de su labor docente, la convirtieron por más de cinco décadas en una personalidad laboriosa y respetada de la escena cubana.
Siempre leal a sus maestros y colegas, a la creadora le tocó despedir a varios de sus hermanos en el arte, entre ellos, Jesús Ruíz, artífice de la Galería de Diseño Escénico “Raúl Oliva”.
Mantener viva la Galería, potenciar el carácter docente y aunar un equipo capaz de visibilizar el legado de los más importantes diseñadores cubanos, es de las huellas imborrables dejadas por Laferté, quien fue celebrada a su gusto con la inauguración de Navegando con oficio, exposición a la que contribuyó a través de sus ideas hasta una semana antes de fallecer.

La exhibición resume la labor de los artistas visuales Guillermo Malberti y Patricia Díaz junto al grupo teatral “Nave Oficio de Isla Comunidad Creativa”. Con curaduría y montaje de Sara Díaz y Alejandro Escalona, la selección incluye piezas de los espectáculos La cita, Luz, El collar y La vida es vieja.
El director de “Nave Oficio de Isla”, Osvaldo Doimeadiós, se refiere a la comunicación en equipo establecida con los protagonistas de la muestra:
“Hemos sostenido una estrategia de trabajo que parte de la investigación, el trabajo de mesa, y las necesidades del proceso creativo. En La cita propuse la referencia al desfile de Channel en el Prado de La Habana y la presencia de uno de sus leones y el banco para definir el espacio, por lo que la tarea fundamental del diseño fue sintetizar esas ideas y materializarlas.
“En el caso de Oficio de isla partimos de la transparencia de la ciudad y la manera en que estamos expuestos a la mirada del que llega. Las piezas incluyeron el blanco, la iconografía martiana, los coturnos como barcos que usar los barqueros y otras referencias que dialogan entre sí, con los actores y dentro del espectáculo, e integran el discurso escénico.

“Luz planteó mayor complejidad al incorporar elementos en un viaje a través de todo el espectáculo, sea el pez que guarda una referencia literaria, o el miriñaque transformado en tendedera; los objetos resumen elementos identitarios y contemporaneidad.
“En El collar, el miriñaque-andador carga piezas en miniatura y se convierte en la casa a cuestas del personaje. Cada espectáculo genera nuevas poéticas que los diseñadores resuelven a nivel visual, espacial y funcional; lo mismo sucede con la escenografía”.
Según la curadora Sara Díaz, las piezas que conforman Navegando con oficio están ordenadas en una especie de caos, en el que cada obra tiene una identidad propia, no con la intención de reproducir el hecho teatral, sino con el fin de crear un escenario distinto que sugiere nuevos significados.
La megainstalación dedica un segmento al recorrido cinematográfico de Malberti en los filmes: Contigo, pan y cebolla, El premio flaco, Crematorio 1 y Nada. Vale recordar que Nieves Laferté asumió el diseño escenográfico del filme Nada, del cual Guillermo fue director de arte.

Además, la propuesta expositiva incluye fotos de la tesis de graduación del entonces Instituto Superior de Arte (ISA) en 1988 de Malberti, y máscaras diseñadas y realizadas para Blanco, con dirección de José Antonio Caballero.
El montaje evidencia la intención explícita de impregnar un carácter escultórico a los elementos de la escenografía. La presencia de materiales como el acero, la madera, el cartón corrugado, el tejido crudo y muchos otros refuerzan la función de hilo conductor unificador de la obra teatral, escultórica y visual.
Malberti está ligado a la escena desde niño por ser hijo de actores, pero fue en la actual Universidad de las Artes (ISA) donde sintió la necesidad de incidir en la vida pública. Su interés por el diseño escenográfico lo llevó a cursar, años después, el posgrado sobre esa materia impartido por Nieves en dicha institución.
La exposición Navegando con Oficio honra el legado de la diseñadora y pedagoga Nieves Laferté.
El devenir en el cine y el teatro conduce al artista a no establecer diferencias conceptuales a la hora de diseñar para esos medios, excepto por las soluciones distintas que requieren el espacio teatral y el soporte cinematográfico.
La formación de Patricia partió del diseño gráfico y su obra visual se inspira en la cotidianeidad, los lugares que la rodean, las circunstancias que se suscitan en la vida de todos, los comentarios de la gente y sus propias experiencias, expresados en un lenguaje surreal, mediante el lienzo pintado, en el que trabaja manchas sin difuminar por medio de la espátula, el bordado dibujado, o una pieza tridimensional.
Coincidentes en conceptos y soluciones técnicas, los artistas establecieron el compromiso colaborativo en la reparación de las piezas de La cita y en la obra escultórica de Malberti. Desde la primera lectura del texto de Oficio de Isla unieron fortalezas a favor del teatro.
Acerca del premiado espectáculo, refiere el escultor:
“Oficio de Isla es, sin dudas, la obra que marcó nuestro trabajo. Fue una experiencia muy abarcadora; diseñamos para el primer espacio donde se estrenó, una nave inmensa en la que el espectador podía tener visión total de la acción escénica. Disfrutar del éxito sostenido de la puesta nos llena de mucha satisfacción”.

Los creadores visuales comentan respecto a la dinámica que sostienen con los teatristas:
“A la hora de crear una escenografía para los espectáculos nos reunimos con Doimeadiós y él nos muestra sus intenciones con las especialidades. Después de leer el texto y darnos las pautas, hacemos una investigación y entregamos ideas en una misma línea creativa.
“De la misma manera trabajamos con otros directores que nos traen propuestas y pautas generales. Los bombardeamos con ideas y posibles soluciones, siempre en la búsqueda de una manera de hacer o estilo que unifique el trabajo. En este momento estamos inmersos en dos proyectos vinculados a “Nave…”, con la dirección de Robert Daniel D’Luciano y Bryan Jardines”.
La numerosa presencia de los jóvenes actores de “Nave Oficio de Isla Comunidad Creativa” en la apertura de la muestra reafirma el concepto integrador de las artes que defiende Doimeadiós en su proyecto, y el interés por el diseño, revalorizado de manera primordial en todas las facetas a la vida contemporánea.
La exposición Navegando con Oficio estará abierta al público hasta el mes de octubre en la galería “Raúl Oliva” del Complejo Bertolt Brecht. Se trata de una ventana excepcional para acercarnos a la obra de Guillermo Malberti y Patricia Díaz en algunos de los más exitosos espectáculos teatrales de los últimos años, y honrar la continuidad del legado de la diseñadora y pedagoga Nieves Laferté.

