“Náutica XX”

Hemos abierto el pez

no había secretos

no nos avisó

si la tormenta próxima sería al amanecer

Apenas cayó sobre cubierta

le clavamos el cuchillo vientre arriba

las agallas abiertas

no conseguían el aire necesario para salvarlo.

El corte fue dispar

tal vez nos apuramos demasiado

y se ha callado el pez

negándose a todas las faenas.

¿Quién comerá esa carne

quién el mal agüero

la desinformación?

Hemos abierto el pez

ciegos deambulamos

atados a la cobardía.

Se escucha viento

los velámenes parecen despertar

cada uno en su puesto

simula

el barco dando vueltas en redondo

flota

en la cubierta el pez

con sospechosa ingenuidad

sonríe.