El pasado domingo 19 de mayo la Televisión Cubana brindó en carácter de reposición, en el popular espacio Arte Siete, el documental Dos Ríos: el enigma, del realizador Roly Peña. La obra —auspiciada por la Sociedad Cultural “José Martí”— muestra las últimas veinticuatro horas en la vida del autor de Versos libres y desde un análisis científico, topográfico e histórico trata de brindar una explicación objetiva de las circunstancias en que muere nuestro Apóstol.

A propósito de esta nueva oportunidad, retomo para los lectores de La Jiribilla el diálogo que sostuve con uno de sus realizadores en ocasión de su estreno hace varios años. Ernesto Gómez Vázquez nos comparte la experiencia de abordar para la televisión un asunto histórico que ha tenido a lo largo de varias décadas diversas hipótesis interpretativas.

Ernesto, ¿en qué consistió tu labor en la realización de Dos Ríos: el enigma?

“Soy diseñador y tengo en mi haber como editor de audiovisuales cuatro documentales en diferentes años: tres de ellos relacionados con la medicina y uno con esa figura emblemática de nuestra música: Amadito Valdés, las baquetas de oro del Buena Vista Social Club. En septiembre del año 2010, Roly Peña me contacta para que participe como editor del documental que se estaba filmando en ese momento y que versaba sobre el enigma que rodea la muerte del Apóstol. Fue para mí un gran honor que tan prestigioso realizador me hiciera tal propuesta. Una vez que estuvo terminada la etapa de filmación, se iniciaron largas jornadas de trabajo para la edición de los materiales”.

El director de televisión Roly Peña comenzó a trabajar en 2010 el documental sobre la muerte de Martí. Imagen: Tribuna de La Habana.

La obra tiene numerosos efectos especiales que contribuyen estéticamente a la contextualización geográfica de los hechos que narra y analiza en la zona de Dos Ríos. ¿Cómo surge la idea de introducir, sin detrimento de la verdad histórica, esta forma dinámica y atractiva de presentar las diversas etapas de un hecho relevante para Cuba y América? ¿Con qué objetivos?

“Esta pieza constituyó un reto para todo el equipo de realización, pues era imprescindible hacer un material que atrapara al televidente. No es tarea fácil mantener la atención de alguien hacia un tema histórico durante 45 minutos, y mucho menos en Cuba, que hablar de Martí parecería un tema trillado. Pero el quid del asunto radicaba en advertir a ese mismo televidente que se trataba de algo novedoso, de un asunto poco abordado por los medios, como es la circunstancia de la caída de nuestro Héroe Nacional.

“Por tanto, el lenguaje visual también tenía que ser diferente y apostamos por la animación en 3D que realizaron los alumnos de la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI), dirigidos por el profesor Gadiel Carrero. Es una forma de llegar a los más amplios y diversos sectores, sobre todo, a los jóvenes para quienes las nuevas tecnologías suelen ser tan atractivas. Es la vía de hacer llegar la información sobre nuestra historia en el lenguaje audiovisual contemporáneo que prefieren las nuevas generaciones como un camino para su conocimiento y apropiación”.

En la realización del documental se utilizaron novedosos recursos gráficos para llegar, sobre todo, a los jóvenes. Imagen: Fotograma del documental

¿Qué significa para ti, como realizador y como cubano, la posibilidad de haber aportado tu empeño, tiempo y talento al nacimiento de un documental sobre horizontes relacionados con nuestro Héroe Nacional desde cuyo estreno se pudo intuir su amplia recepción entre estudiosos, especialistas y el público en general?

“Soy martiano por naturaleza, como la gran mayoría de los cubanos. No soy un experto en temas históricos, pero siempre me he interesado por cultivar mi curiosidad en esa dirección. En mi juventud la vida me puso frente a un excepcional historiador: José Luciano Franco, quien de una forma muy amena narraba la historia de Cuba y, sobre todo, la vida de sus protagonistas con sus virtudes y defectos haciéndolos más humanos. Eso para mí es lo más importante, sin envolverlos en ese halo místico e idealista con que a veces se les rodea. En eso consiste, según mi punto de vista, la fortaleza histórica de este material”.

¿El equipo encabezado por Roly Peña tiene la idea de retomar para la televisión otros enigmas relacionados con la historia de Cuba, o este trabajo fue una idea coyuntural y vuelven a otras temáticas de actualidad?

“Tenemos más proyectos relacionados con nuestro devenir histórico. La buena recepción que ha tenido el documental en todo el país ha sido un estímulo significativo. Nos han brindado muchas sugerencias e ideas. Este documental solo fue el principio. Tenemos en agenda otros proyectos. Nos gustaría hacer los Diarios de campaña de Martí, pues sería un punto de partida para narrar gran parte de su vida, en Guatemala, en México, en Estados Unidos, etc., profundizar en el tema y mostrarlo al televidente de una forma amena, lúdica, es decir, motivar a la juventud a dirigir su mirada hacia nuestras raíces, algo tan importante para garantizar la continuidad del interés, el conocimiento y el orgullo por nuestra identidad”.