¿Cuántas dimensiones puede abarcar un color? Esta vez el Rojo es la respuesta a muchas interrogantes. Crear es, quizá, la esencia primaria de May Reguera, actriz y fotógrafa, quien inauguró el pasado 6 de junio en la Galería Taller Gorría, su séptima exposición personal, Rojo.

May Reguera (Cruces, 1990), graduada de la Escuela Nacional de Arte y luego del Instituto Superior de Arte en la disciplina de Arte Teatral, es una mujer curiosa e intuitiva, desde ahí llegó a la fotografía. Sus exposiciones anteriores han marcado un recorrido por la diversidad, la igualdad de género, la maternidad y la sororidad. Dentro de las propuestas de Reguera podemos dialogar también con los colores, con la naturaleza, una mezcla perfecta que marca un estilo propio de la autora.

Banco representa su primera muestra al público, una exposición exhibida en Cruces, su ciudad natal. Telón (2016) llega como su primera exposición personal que representa, según ha dicho la artista, un salto de la actuación hacia la fotografía. Amar&ya (2018) y Paisaje (2018), constituyen muestras que permitieron el intercambio entre los colores, la observación y una esencia única de la artista de ver la vida.

“Sus exposiciones anteriores han marcado un recorrido por la diversidad, la igualdad de género, la maternidad y la sororidad”.

Luego de la censura de una foto de la artista en redes sociales, llega la idea de Libre (2019) muestra donde exploró el desnudo como metáfora de liberación. Vida #latribu (2022) es su primera exposición luego de ser madre, de ahí el concepto principal de la misma: “Vida nació de la soledad que implica entrar en la maternidad y del tránsito hacia maternar en tribu, de encontrar nueva compañía, de encontrar un ejército de mujeres y sus armas poderosas: las tetas”.

Llegamos a Ceiba (2024), exhibida en España, en el marco de la Semana Hispana de la Moda, lo que refleja el amor por la creación desde la semilla “Raíces y ramas del árbol que sembré en mi patio mientras crecía”. Oleaje (2024) como concepto inunda el recorrido de la artista, participación dentro de la exposición colectiva con la que se graduó de Máster en Fotografía por PhotoEspaña; constituyen el recorrido artístico de Reguera.

“Las propuestas de May destacan por sus colores vibrantes”.

Las propuestas de May destacan por sus colores vibrantes. Amar&ya constituyó la primera exposición donde se hacía referencia al color desde el nombre, muestra donde se plasmó desde el estilo de la artista la obra de diseñadores consagrados y emergentes, enfocando, como esencia de la artista, gran peso en las percepciones que podemos experimentar desde el color. En esta ocasión, Rojo llega para reflejar el virtuosismo de Reguera, con una muestra de más de 50 fotografías y varios formatos expositivos.

Mi primer acercamiento a Rojo fue a través de una convocatoria abierta en redes sociales, donde la artista invitaba a toda mujer a participar en su próxima exposición. Lo que tenían que hacer era donar un vestido rojo, el día previsto se les realizarían fotos y las involucradas dejarían en video un testimonio personal.

“La fotografía es vida para May, la opción de transformarse y transformar lo percibido a través de su lente”.

En esta ocasión May busca mezclar, la fotografía, el teatro y a la mujer desde el simbolismo del color rojo.

La fotografía es vida para May, la opción de transformarse y transformar lo percibido a través de su lente. Montar el set, fotografiar, crear personajes, desmontarlos… desde esa premisa y como homenaje al teatro cubano, se mezcla el vestuario, el escenario y voces representativas para conformar una nueva mirada de la escena. El teatro —parece susurrarme Reguera— es casa.

El teatro no ha sido solo un concepto para esta exposición sino lugar y, por qué no, refugio de algo más que escenas. Entrar al escenario cuando no hay público también tiene su magia, apoderarse del tabloncillo, mezclar el vestuario con otros personajes, esta vez personas que se entregaron a la artista para el acto de crear.

Rojo también es hilvanar el dolor femenino, honrar a la mujer desde su fuerza y creatividad. Hasta el 28 de junio los interesados podrán disfrutar de la exposición y participar de las conferencias que estarán sesionando en la propia Galería Taller Gorría, ubicada en San Isidro número 214 entre Picota y Compostela, La Habana Vieja, a cargo del actor Fernando Hechavarría, Fabricio Hernández y Laura Delgado.

Rojo llega para reflejar el virtuosismo de Reguera, con una muestra de más de 50 fotografías y varios formatos expositivos”.

La muestra une diversos formatos artísticos como la fotografía, instalaciones textiles, acciones performativas y video, lo que permite un diálogo entre el espacio y el espectador.

Rojo es la calma con la que se teje, pero también es el grito.